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Varias canciones populares pueden ayudar a salvar vidas en caso de parada cardíaca, según la Sociedad Española de Medicina Intensiva
Canciones como 'La Macarena' y 'Stayin' Alive' tienen ritmos perfectos para practicar la reanimación cardiopulmonar.
Publicado: 16 de octubre de 2025, 12:13
El Día Mundial de la Reanimación Cardiopulmonar (RCP), celebrado el 16 de octubre, ha resaltado la importancia de esta técnica vital que puede triplicar las posibilidades de sobrevivir a una parada cardíaca. Este año, la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC) ha lanzado un reto que anima al público a practicar RCP al ritmo de canciones populares que poseen un compás adecuado para realizar compresiones efectivas.
Temas icónicos como 'Vogue' de Madonna y 'Another One Bites the Dust' de Queen, entre otros, son sugeridos por la SEMICYUC para facilitar la práctica de la RCP. Además, en el contexto actual, se ha hecho hincapié en que la enseñanza de la RCP debería ser obligatoria en las escuelas, tal como indican varios expertos en el Día Mundial de la Parada Cardíaca, resaltando que una mejor educación podría mejorar significativamente la tasa de supervivencia. Por cada minuto que pasa tras una parada cardíaca, las posibilidades de supervivencia disminuyen un 10%, por lo que la capacitación en RCP es crucial.
La SEMES también subraya que, dado que las paradas cardíacas suelen ocurrir en entornos fuera de hospitales, cualquiera puede intervenir realizando RCP básica, lo que puede resultar crítico hasta que lleguen los servicios de emergencia. El Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) se suma a este esfuerzo ofreciendo talleres en varias ciudades, enfatizando la importancia de la educación y la preparación ante emergencias cardíacas. También, se está promoviendo el uso de desfibriladores externos automáticos (DEA) que deberían estar accesibles en menos de cinco minutos en cualquier lugar, una meta que se considera esencial para lograr un país cardioprotegido, según los expertos. Así lo comenta Jose Moya, del Plan Nacional de RCP, quien recalca la necesidad de involucrar a la sociedad en este esfuerzo.
En este contexto, el gerente del Plan Nacional de RCP destaca que solo alrededor del 5% a 10% de la población está adecuadamente capacitada en estas maniobras, aunque la participación en cursos ha crecido significativamente desde la pandemia. Además, se están utilizando aplicaciones móviles para localizar desfibriladores, intensificando la conciencia sobre la necesidad de estar preparados para actuar.
Temas icónicos como 'Vogue' de Madonna y 'Another One Bites the Dust' de Queen, entre otros, son sugeridos por la SEMICYUC para facilitar la práctica de la RCP. Además, en el contexto actual, se ha hecho hincapié en que la enseñanza de la RCP debería ser obligatoria en las escuelas, tal como indican varios expertos en el Día Mundial de la Parada Cardíaca, resaltando que una mejor educación podría mejorar significativamente la tasa de supervivencia. Por cada minuto que pasa tras una parada cardíaca, las posibilidades de supervivencia disminuyen un 10%, por lo que la capacitación en RCP es crucial.
La SEMES también subraya que, dado que las paradas cardíacas suelen ocurrir en entornos fuera de hospitales, cualquiera puede intervenir realizando RCP básica, lo que puede resultar crítico hasta que lleguen los servicios de emergencia. El Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) se suma a este esfuerzo ofreciendo talleres en varias ciudades, enfatizando la importancia de la educación y la preparación ante emergencias cardíacas. También, se está promoviendo el uso de desfibriladores externos automáticos (DEA) que deberían estar accesibles en menos de cinco minutos en cualquier lugar, una meta que se considera esencial para lograr un país cardioprotegido, según los expertos. Así lo comenta Jose Moya, del Plan Nacional de RCP, quien recalca la necesidad de involucrar a la sociedad en este esfuerzo.
En este contexto, el gerente del Plan Nacional de RCP destaca que solo alrededor del 5% a 10% de la población está adecuadamente capacitada en estas maniobras, aunque la participación en cursos ha crecido significativamente desde la pandemia. Además, se están utilizando aplicaciones móviles para localizar desfibriladores, intensificando la conciencia sobre la necesidad de estar preparados para actuar.