Progresista 27.8%Conservador 72.2%
USS Gerald R. Ford, el portaaviones más grande del mundo, despliega en el Caribe para combatir el narcotráfico y amenazas transnacionales.
El buque de guerra más avanzado inicia operaciones en aguas caribeñas en un momento de tensión con Venezuela.
Publicado: 16 de noviembre de 2025, 19:52
El portaaviones USS Gerald R. Ford, el más grande del Pentágono, ha entrado este domingo en aguas del Caribe con el objetivo de 'combatir las amenazas transnacionales', según el jefe del Comando Sur de Estados Unidos, almirante Alvin Holsey. Este despliegue se produce en medio de la tensión entre Estados Unidos y Venezuela bajo órdenes del secretario de Defensa, Pete Hegseth.
Considerado como la 'plataforma de combate más capaz, versátil y letal del mundo', el USS Gerald R. Ford tiene 335 metros de longitud, pesa más de 100,000 toneladas y está preparado para alojar 4,500 tripulantes y 70 aviones. Durante sus pruebas en 2021, demostró su resistencia a condiciones extremas y tiene un papel clave en operaciones militares marinas. Este despliegue está relacionado con la operación Southern Spear en la lucha contra el narcotráfico procedente de Latinoamérica.
El portaaviones opera en conjunto con la Unidad Expedicionaria 22 a bordo del USS Iwo Jima, con el objetivo de fortalecer la seguridad en la región y desmantelar organizaciones criminales que operan en el hemisferio occidental. Se estima que operar el portaaviones cuesta aproximadamente 8.4 millones de dólares al día, destacando la complejidad de mantener una defensa naval de tal envergadura.
Considerado como la 'plataforma de combate más capaz, versátil y letal del mundo', el USS Gerald R. Ford tiene 335 metros de longitud, pesa más de 100,000 toneladas y está preparado para alojar 4,500 tripulantes y 70 aviones. Durante sus pruebas en 2021, demostró su resistencia a condiciones extremas y tiene un papel clave en operaciones militares marinas. Este despliegue está relacionado con la operación Southern Spear en la lucha contra el narcotráfico procedente de Latinoamérica.
El portaaviones opera en conjunto con la Unidad Expedicionaria 22 a bordo del USS Iwo Jima, con el objetivo de fortalecer la seguridad en la región y desmantelar organizaciones criminales que operan en el hemisferio occidental. Se estima que operar el portaaviones cuesta aproximadamente 8.4 millones de dólares al día, destacando la complejidad de mantener una defensa naval de tal envergadura.