Progresista 53.3%Conservador 46.7%
Un hombre muere de un paro cardíaco en Torremolinos durante un intento de robo, lo que genera controversia sobre la intervención policial.
La Policía Nacional actuó tras ser alertada por el robo en un establecimiento de telefonía, pero el sospechoso entró en estado crítico durante la detención.
Publicado: 8 de diciembre de 2025, 23:10
En la tarde del pasado domingo, 7 de diciembre de 2025, un hombre de 35 años perdió la vida en un locutorio en Torremolinos, Málaga, tras sufrir una parada cardiorrespiratoria mientras era reducido por agentes de la Policía Nacional. Este incidente ocurrió en el marco de un presunto intento de robo con violencia en el establecimiento de telefonía. Los hechos se desarrollaron cuando el servicio de emergencias 112 recibió un aviso sobre el robo. Al llegar, los agentes encontraron al sospechoso, quien había sido retenido en el interior por clientes y trabajadores del local debido a su estado de agitación.
Durante el proceso, los agentes solicitaron asistencia médica ante la gravedad del estado del individuo. A pesar de que tanto la policía como los servicios sanitarios intentaron reanimarlo, sus esfuerzos fueron inútiles y el fallecimiento del hombre fue confirmado en el lugar del suceso. La noticia ha generado diversas reacciones y cuestionamientos sobre los procedimientos utilizados por la policía, sugiriendo que pudo estar en estado de embriaguez, lo cual complicó la situación. Tras el deceso, la Policía Nacional activó el protocolo judicial correspondiente, con la llegada de una comitiva judicial para esclarecer los detalles del suceso.
Las autoridades han manifestado que actuaron de acuerdo a los protocolos establecidos ante la emergencia y que se seguirá investigando la secuencia completa de los hechos, desde la llamada inicial al 112 hasta el momento crítico en que el hombre sufrió la parada cardiorrespiratoria.
Durante el proceso, los agentes solicitaron asistencia médica ante la gravedad del estado del individuo. A pesar de que tanto la policía como los servicios sanitarios intentaron reanimarlo, sus esfuerzos fueron inútiles y el fallecimiento del hombre fue confirmado en el lugar del suceso. La noticia ha generado diversas reacciones y cuestionamientos sobre los procedimientos utilizados por la policía, sugiriendo que pudo estar en estado de embriaguez, lo cual complicó la situación. Tras el deceso, la Policía Nacional activó el protocolo judicial correspondiente, con la llegada de una comitiva judicial para esclarecer los detalles del suceso.
Las autoridades han manifestado que actuaron de acuerdo a los protocolos establecidos ante la emergencia y que se seguirá investigando la secuencia completa de los hechos, desde la llamada inicial al 112 hasta el momento crítico en que el hombre sufrió la parada cardiorrespiratoria.