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Ucrania enfrenta nuevos ataques aéreos rusos mientras descubre drones modificados con capacidades avanzadas
Las defensas ucranianas derriban drones enemigos, pero también encuentran tecnología nueva que complica la defensa aérea.
Publicado: 22 de junio de 2025, 12:00
En el contexto del conflicto entre Ucrania y Rusia, las fuerzas armadas ucranianas han conseguido derribar una cantidad significativa de drones lanzados por Rusia, mientras que también han descubierto nuevas amenazas en forma de drones modificados. Las defensas antiaéreas de Ucrania informaron sobre el derribo de 18 drones Shahed en ataques sobre el norte del país, afectando localidades como Cherníguiv, Sumi y Odesa, lo que resalta la escalada en el uso de drones.
Rusia, por su parte, no solo ha lanzado drones, sino que también empleó misiles balísticos y otros vehículos aéreos no tripulados en sus ataques. Además, se ha reportado que las fuerzas rusas lograron derribar 10 drones ucranianos en regiones como Smolensk y Briansk. Este intercambio de ataques aéreos indica un aumento significativo en la intensidad del conflicto.
Del lado ucraniano, se ha recuperado un nuevo modelo de dron ruso, un Sahed modificado que ofrece capacidades avanzadas, incluyendo inteligencia artificial y un sistema de radiocontrol que permite operar a distancias de hasta 150 kilómetros. Esto representa una nueva amenaza para Ucrania, aumentando la dificultad de su defensa aérea, ya que la combinación de ataques continuos y drones más sofisticados exige una respuesta adaptativa por parte de sus fuerzas armadas.
Rusia, por su parte, no solo ha lanzado drones, sino que también empleó misiles balísticos y otros vehículos aéreos no tripulados en sus ataques. Además, se ha reportado que las fuerzas rusas lograron derribar 10 drones ucranianos en regiones como Smolensk y Briansk. Este intercambio de ataques aéreos indica un aumento significativo en la intensidad del conflicto.
Del lado ucraniano, se ha recuperado un nuevo modelo de dron ruso, un Sahed modificado que ofrece capacidades avanzadas, incluyendo inteligencia artificial y un sistema de radiocontrol que permite operar a distancias de hasta 150 kilómetros. Esto representa una nueva amenaza para Ucrania, aumentando la dificultad de su defensa aérea, ya que la combinación de ataques continuos y drones más sofisticados exige una respuesta adaptativa por parte de sus fuerzas armadas.