Progresista 100%Conservador 0%
Trump intenta mediar en el conflicto entre Tailandia y Camboya mientras los enfrentamientos continúan
A pesar de un supuesto acuerdo de alto el fuego promovido por el presidente estadounidense, las hostilidades siguen en la frontera.
Publicado: 17 de diciembre de 2025, 20:25
El conflicto entre Tailandia y Camboya ha resurgido con intensidad, a pesar de los esfuerzos de mediación del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. El pasado 10 de diciembre, Trump anunció su intención de intervenir en la disputa territorial, afirmando que planeaba realizar "una llamada telefónica" para detener lo que describió como una guerra entre "dos países muy poderosos". Esta declaración surgió en un contexto de creciente tensión, que ha resultado en la evacuación de más de 500,000 personas debido a enfrentamientos en la frontera común.
La situación empeoró notablemente cuando el 13 de diciembre, Trump anunció que Tailandia y Camboya habían acordado cesar todos los disparos y regresar al Acuerdo de Paz firmado en julio. Sin embargo, esta aparente tregua no ha tenido el impacto esperado, ya que los combates continuaron con un saldo de al menos 26 muertos y cientos de heridos, según los reportes de ambas naciones. Las acusaciones mutuas entre los ejércitos tailandés y camboyano han destacado el estado de tensión en la región, con ambos gobiernos culpándose mutuamente por la falta de cumplimiento del acuerdo.
Este conflicto tiene raíces históricas, con disputas de territorio que se remontan a los tiempos del colonialismo francés. La mediación de Trump puede haber proporcionado una solución temporal en el pasado, pero la fragilidad de los acuerdos ha quedado evidentemente expuesta. El impacto humano se siente con miles de desplazados y un creciente número de víctimas, lo que plantea serias preocupaciones sobre la estabilidad y el futuro en la región.
La situación empeoró notablemente cuando el 13 de diciembre, Trump anunció que Tailandia y Camboya habían acordado cesar todos los disparos y regresar al Acuerdo de Paz firmado en julio. Sin embargo, esta aparente tregua no ha tenido el impacto esperado, ya que los combates continuaron con un saldo de al menos 26 muertos y cientos de heridos, según los reportes de ambas naciones. Las acusaciones mutuas entre los ejércitos tailandés y camboyano han destacado el estado de tensión en la región, con ambos gobiernos culpándose mutuamente por la falta de cumplimiento del acuerdo.
Este conflicto tiene raíces históricas, con disputas de territorio que se remontan a los tiempos del colonialismo francés. La mediación de Trump puede haber proporcionado una solución temporal en el pasado, pero la fragilidad de los acuerdos ha quedado evidentemente expuesta. El impacto humano se siente con miles de desplazados y un creciente número de víctimas, lo que plantea serias preocupaciones sobre la estabilidad y el futuro en la región.