Trump intensifica su ataque a las universidades con una nueva orden para modificar el sistema de acreditaciones

El presidente estadounidense, Donald Trump, ha dado un paso significativo en su estrategia contra las universidades al firmar una nueva orden ejecutiva que promete cambiar el sistema de acreditación en el país. Esta medida es vista como una 'arma secreta' del mandatario para ejercer presión sobre las instituciones educativas que no se alinean con sus ideales políticos y busca que las universidades pierdan el acceso a fondos cruciales si no se adhieren a la agenda del gobierno.

El decreto está destinado a acabar con lo que Trump y su administración consideran prácticas 'discriminatorias' relacionadas con las políticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI). Los republicanos critican estas políticas como 'antimeritocráticas' y argumentan que han permitido que una ideología 'woke' influya en los estándares de acreditación. La orden también establece obligaciones de rendición de cuentas para las organizaciones de acreditación, lo que podría modificar radicalmente el proceso de decisiones y currículum de las universidades.

Las consecuencias de esta orden han suscitado controversia. Harvard ha demandado a la administración Trump, afirmando que se siente coaccionada por las presiones económicas. Otras universidades de la Ivy League están observando de cerca las implicaciones, ya que la nueva política de acreditación podría forzarlas a reconsiderar sus políticas de diversidad para mantener su financiación.