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Trump firma orden ejecutiva que permite la remoción forzada de personas sin hogar a centros de tratamiento en EEUU
La medida ha generado controversia por sus implicaciones sobre derechos humanos y la gestión del problema de la falta de vivienda.
Publicado: 25 de julio de 2025, 06:41
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el 25 de julio de 2025 una controvertida orden ejecutiva que facilita a los estados y municipios retirar a las personas sin hogar de las calles y enviarlas a centros de tratamiento, a pesar de que no hayan dado su consentimiento. Esta medida ha sido criticada por diversos organismos de derechos humanos y forma parte de un nuevo enfoque gubernamental centrado en la supuesta protección de la seguridad pública.
La orden instruye a la fiscal general, Pam Bondi, a tomar acciones legales para revocar normativas que limitan a los gobiernos locales la capacidad de mover a personas en situación de calle a centros de tratamiento. Además, se solicita apoyo para el internamiento civil de personas con enfermedades mentales que podrían ser un peligro. Organizaciones como la ACLU han expresado preocupación por la orden, señalando que refleja un desprecio por la dignidad de las personas vulnerables.
La normativa también prioriza subvenciones a entidades que implementen prohibiciones de consumo de drogas en espacios públicos. Esta intervención surge en un contexto donde el número de personas sin hogar alcanzó cifras récord en 2024. La aceptación de esta orden sigue políticas previas de Trump, que incluyen el desalojo de campamentos de personas sin hogar en terrenos federales, lo cual ha llevado a críticas sobre el agravamiento del problema de la falta de vivienda.
La orden instruye a la fiscal general, Pam Bondi, a tomar acciones legales para revocar normativas que limitan a los gobiernos locales la capacidad de mover a personas en situación de calle a centros de tratamiento. Además, se solicita apoyo para el internamiento civil de personas con enfermedades mentales que podrían ser un peligro. Organizaciones como la ACLU han expresado preocupación por la orden, señalando que refleja un desprecio por la dignidad de las personas vulnerables.
La normativa también prioriza subvenciones a entidades que implementen prohibiciones de consumo de drogas en espacios públicos. Esta intervención surge en un contexto donde el número de personas sin hogar alcanzó cifras récord en 2024. La aceptación de esta orden sigue políticas previas de Trump, que incluyen el desalojo de campamentos de personas sin hogar en terrenos federales, lo cual ha llevado a críticas sobre el agravamiento del problema de la falta de vivienda.