Progresista 41.7%Conservador 58.3%
Simeón II de Bulgaria pone a la venta La Villa del Zar, un emblemático palacio histórico en Banya con aguas termales
La propiedad, construida en 1929 por el zar Boris III, ha despertado el interés y la preocupación de la comunidad local.
Publicado: 17 de junio de 2025, 19:49
El exzar Simeón II de Bulgaria ha decidido poner a la venta La Villa del Zar, ubicada en el pueblo de Banya, a aproximadamente 180 kilómetros de Sofía. Este majestuoso palacio, erigido en 1929 por su padre, el zar Boris III, ha sido un símbolo en la historia de Bulgaria, y tras el regreso de Simeón II en 2001, comenzó un proceso de recuperación, aunque actualmente se encuentra deteriorado, lo que preocupa a la comunidad.
El anuncio de la venta ha generado revuelo, ya que no se ha hecho pública información sobre el precio, solo que es 'negociable'. Se menciona que podría rondar los 25 millones de euros, mientras que algunos ciudadanos consideran que debería ser comprada por el Estado para convertirse en un centro cultural o museo. La villa tiene valor arqueológico y turístico, además de ser parte integral de la identidad cultural de la región.
Los arquitectos Ivan Vasilyov y Dimitar Tsolov diseñaron el palacio, que aún conserva elementos originales del renacimiento nacional búlgaro. A pesar de su estado deteriorado, podría atraer a compradores interesados en restauraciones que celebren su historia y patrimonio cultural.
El anuncio de la venta ha generado revuelo, ya que no se ha hecho pública información sobre el precio, solo que es 'negociable'. Se menciona que podría rondar los 25 millones de euros, mientras que algunos ciudadanos consideran que debería ser comprada por el Estado para convertirse en un centro cultural o museo. La villa tiene valor arqueológico y turístico, además de ser parte integral de la identidad cultural de la región.
Los arquitectos Ivan Vasilyov y Dimitar Tsolov diseñaron el palacio, que aún conserva elementos originales del renacimiento nacional búlgaro. A pesar de su estado deteriorado, podría atraer a compradores interesados en restauraciones que celebren su historia y patrimonio cultural.