Progresista 50%Conservador 50%
Shigeru Ishiba, primer ministro de Japón, contempla dimitir tras perder la mayoría en elecciones del Senado
La debacle electoral y las tensiones políticas aumentan la presión sobre Ishiba para que deje su cargo en agosto.
Publicado: 23 de julio de 2025, 06:54
El primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, está considerando su dimisión tras una severa derrota electoral que dejó a su partido, el Partido Liberal Democrático (PLD), sin mayoría en la Cámara Alta del Parlamento. Con solo 47 escaños obtenidos en la reciente elección, la presión sobre Ishiba se ha intensificado, llevando a algunos miembros del partido a afirmar que su renuncia es 'inevitable'. Se espera que Ishiba haga el anuncio de su renuncia a finales de agosto tras sostener conversaciones con líderes importantes del PLD.
La situación se complica por la pérdida de la mayoría en la Cámara Baja en octubre, que ocurrió poco después de que asumiera el cargo. Pese a la presión en su contra, Ishiba ha manifestado su intención de cumplir con su deber, haciendo hincapié en la necesidad de estabilidad política y la finalización de negociaciones comerciales con Estados Unidos. Sin embargo, su capacidad para manejar estos asuntos está en duda debido a su inestabilidad política.
Si Ishiba decide renunciar, esto podría desencadenar una nueva carrera electoral dentro del PLD. La situación política de Japón se presenta ya complicada por diversos retos, incluyendo una crisis de precios del arroz y un importante declive demográfico. Un nuevo líder del partido tendrá que navegar por estas dificultades sin contar con una mayoría en ambas cámaras del Parlamento.
La situación se complica por la pérdida de la mayoría en la Cámara Baja en octubre, que ocurrió poco después de que asumiera el cargo. Pese a la presión en su contra, Ishiba ha manifestado su intención de cumplir con su deber, haciendo hincapié en la necesidad de estabilidad política y la finalización de negociaciones comerciales con Estados Unidos. Sin embargo, su capacidad para manejar estos asuntos está en duda debido a su inestabilidad política.
Si Ishiba decide renunciar, esto podría desencadenar una nueva carrera electoral dentro del PLD. La situación política de Japón se presenta ya complicada por diversos retos, incluyendo una crisis de precios del arroz y un importante declive demográfico. Un nuevo líder del partido tendrá que navegar por estas dificultades sin contar con una mayoría en ambas cámaras del Parlamento.