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Rodrigo Paz asume presidency en Bolivia y busca reorientar relaciones internacionales tras expulsión del ALBA
El presidente electo se enfoca en recuperar el papel de Bolivia en el ámbito global, mientras enfrenta críticas de la ALBA.
Publicado: 25 de octubre de 2025, 19:05
La reciente elección de Rodrigo Paz como presidente de Bolivia ha marcado un giro significativo en la política del país andino. Tras su victoria en el balotaje, Paz ha enfatizado su compromiso de 'poner a Bolivia en el mundo y el mundo en Bolivia', destacando la importancia de establecer relaciones con países democráticos y con socios estratégicos como Estados Unidos.
El nuevo presidente ha anunciado que, contrariamente a lo que estipulan los alineamientos políticos anteriores, las 'dictaduras' de Venezuela, Cuba y Nicaragua no estarán invitadas a su juramentación prevista para el 8 de noviembre. Esta declaración provocó una reacción inmediata de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA), que ha decidido expulsar a Bolivia del bloque en respuesta a lo que califican de declaraciones 'proimperialistas y colonialistas'. A pesar de la expulsión, Paz ha declarado que desea mantener una relación de respeto y colaboración con el pueblo boliviano.
Desde su victoria, el presidente electo ha trabajado arduamente con su equipo para abordar la grave crisis económica que enfrenta el país, agradeciendo el apoyo y las promesas de cooperación de Estados Unidos y organismos multilaterales. Aunque ha enfrentado críticas, los organismos internacionales como la Unión Europea y la OEA han validado la victoria de Paz, lo que refleja un apoyo generalizado hacia su mandato.
El nuevo presidente ha anunciado que, contrariamente a lo que estipulan los alineamientos políticos anteriores, las 'dictaduras' de Venezuela, Cuba y Nicaragua no estarán invitadas a su juramentación prevista para el 8 de noviembre. Esta declaración provocó una reacción inmediata de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA), que ha decidido expulsar a Bolivia del bloque en respuesta a lo que califican de declaraciones 'proimperialistas y colonialistas'. A pesar de la expulsión, Paz ha declarado que desea mantener una relación de respeto y colaboración con el pueblo boliviano.
Desde su victoria, el presidente electo ha trabajado arduamente con su equipo para abordar la grave crisis económica que enfrenta el país, agradeciendo el apoyo y las promesas de cooperación de Estados Unidos y organismos multilaterales. Aunque ha enfrentado críticas, los organismos internacionales como la Unión Europea y la OEA han validado la victoria de Paz, lo que refleja un apoyo generalizado hacia su mandato.