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Renfe exige judicialmente 47 millones a la Comunidad de Madrid por impago y acusa de deslealtad institucional
La operadora asegura que la deuda acumulada podría alcanzar los 100 millones si no se realizan los pagos pendientes.
Publicado: 21 de noviembre de 2025, 20:25
Renfe ha presentado un requerimiento judicial al Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM) por el impago de 47,14 millones de euros relacionados con las compensaciones por el uso del Abono Transporte en los servicios de Cercanías. Este conflicto se ha intensificado tras la solicitud de la Comunidad de Madrid al Ministerio de Transportes para que se liquide una supuesta deuda total de 250 millones, cifra que ha sido desmentida por el ministro Óscar Puente.
La operadora pública argumenta que si no se abonan las mensualidades adeudadas, la deuda podría alcanzar los 100 millones de euros para fin de año. Renfe destaca que el CRTM tenía obligación contractual de compensarla por el uso de los abonos, y ha presentado facturas correspondientes a varios meses que no han sido pagadas en el plazo requerido, considerándolo un incumplimiento grave.
Además, Renfe ha denunciado la deslealtad institucional de la Comunidad de Madrid, acusándola de hacer ataques y falsedades que buscan desprestigiar el servicio público. La compañía insiste en que la administración debería aliviar la carga financiera y señala que continúa mejorando el servicio de Cercanías, pese a que considera que se están manipulando los datos financieros y operativos por motivos políticos.
La operadora pública argumenta que si no se abonan las mensualidades adeudadas, la deuda podría alcanzar los 100 millones de euros para fin de año. Renfe destaca que el CRTM tenía obligación contractual de compensarla por el uso de los abonos, y ha presentado facturas correspondientes a varios meses que no han sido pagadas en el plazo requerido, considerándolo un incumplimiento grave.
Además, Renfe ha denunciado la deslealtad institucional de la Comunidad de Madrid, acusándola de hacer ataques y falsedades que buscan desprestigiar el servicio público. La compañía insiste en que la administración debería aliviar la carga financiera y señala que continúa mejorando el servicio de Cercanías, pese a que considera que se están manipulando los datos financieros y operativos por motivos políticos.