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Reino Unido implementa restricciones significativas a los derechos de los refugiados bajo el liderazgo de Keir Starmer
Las nuevas políticas exigirá a los refugiados cumplir condiciones más estrictas para poder residir y reagrupar a sus familias.
Publicado: 2 de octubre de 2025, 12:12
El primer ministro británico, Keir Starmer, ha anunciado un cambio drástico en la política de asilo del Reino Unido, lo que pone fin a derechos automáticos a la residencia permanente y la reagrupación familiar para solicitantes de asilo. Starmer destacó que quienes deseen llegar al Reino Unido deberán contribuir a la sociedad, en un contexto que incluye un acuerdo con Dinamarca para abordar las causas de la migración forzada en los Balcanes.
Las nuevas regulaciones, que entrarán en vigor, duplicarán el tiempo necesario para que los refugiados accedan a la residencia indefinida de cinco a diez años y establecerán requisitos estrictos, como trabajar, cotizar a la seguridad social, dominar el inglés, no tener antecedentes penales y participar en actividades comunitarias. Esta medida ha sido criticada por organizaciones como el Consejo de Refugiados, quienes advierten que puede llevar a más refugiados a recurrir a traficantes para reunirse con sus familias.
El anuncio se produce en un momento donde más de 34,000 migrantes han cruzado el canal de la Mancha este año, marcando un récord desde 2018. La decisión de Starmer ha desatado un debate sobre la ética y efectividad de los métodos de control migratorio y sus repercusiones en la vida de cientos de familias.
Las nuevas regulaciones, que entrarán en vigor, duplicarán el tiempo necesario para que los refugiados accedan a la residencia indefinida de cinco a diez años y establecerán requisitos estrictos, como trabajar, cotizar a la seguridad social, dominar el inglés, no tener antecedentes penales y participar en actividades comunitarias. Esta medida ha sido criticada por organizaciones como el Consejo de Refugiados, quienes advierten que puede llevar a más refugiados a recurrir a traficantes para reunirse con sus familias.
El anuncio se produce en un momento donde más de 34,000 migrantes han cruzado el canal de la Mancha este año, marcando un récord desde 2018. La decisión de Starmer ha desatado un debate sobre la ética y efectividad de los métodos de control migratorio y sus repercusiones en la vida de cientos de familias.