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Putin admite responsabilidad por el derribo de avión azerbaiyano y promete indemnizaciones en medio de tensiones con Bakú
En una reunión con el presidente azerbaiyano, el mandatario ruso se disculpa por el trágico incidente del 25 de diciembre de 2024.
Publicado: 9 de octubre de 2025, 19:33
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha admitido por primera vez la responsabilidad de su país en el derribo de un avión de pasajeros de Azerbaijan Airlines, un incidente que dejó 38 víctimas mortales y tensó las relaciones con Azerbaiyán. La confesión tuvo lugar el 9 de octubre de 2025 en Dusambé, durante una cumbre de naciones ex soviéticas, donde ambos líderes discutieron las consecuencias del suceso.
El vuelo se estrelló el 25 de diciembre de 2024 en Kazajistán, alcanzado por misiles de las defensas rusas, en un contexto de tensiones regionales por el conflicto en Ucrania. Putin se disculpó y prometió indemnizaciones, aunque culpó a Ucrania por su supuesta responsabilidad en el ataque. Las autoridades azerbaiyanas rechazan esta narrativa, lo que ha llevado a un aumento de las tensiones entre los dos países, anteriormente aliados.
Las relaciones han empeorado aún más debido a la pérdida de influencia rusa en el Cáucaso y el creciente papel de Estados Unidos en la mediación y apoyo a Azerbaiyán. Aliyev ha criticado a Moscú por no manejar el accidente con transparencia y ha exigido justicia para las víctimas, marcando el derribo como un grave incidente aéreo y una señal del deterioro de los lazos entre Rusia y Azerbaiyán.
El vuelo se estrelló el 25 de diciembre de 2024 en Kazajistán, alcanzado por misiles de las defensas rusas, en un contexto de tensiones regionales por el conflicto en Ucrania. Putin se disculpó y prometió indemnizaciones, aunque culpó a Ucrania por su supuesta responsabilidad en el ataque. Las autoridades azerbaiyanas rechazan esta narrativa, lo que ha llevado a un aumento de las tensiones entre los dos países, anteriormente aliados.
Las relaciones han empeorado aún más debido a la pérdida de influencia rusa en el Cáucaso y el creciente papel de Estados Unidos en la mediación y apoyo a Azerbaiyán. Aliyev ha criticado a Moscú por no manejar el accidente con transparencia y ha exigido justicia para las víctimas, marcando el derribo como un grave incidente aéreo y una señal del deterioro de los lazos entre Rusia y Azerbaiyán.