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Nigeria enfrenta un alarmante aumento de secuestros tras liberación de estudiantes y ataque a una iglesia evangélica
Incidentes recientes evidencian el crecimiento de la violencia y el negocio del secuestro en el país.
Publicado: 16 de diciembre de 2025, 18:45
La inseguridad en Nigeria ha escalado a niveles alarmantes, reflejada en dos incidentes recientes que han puesto de manifiesto la creciente preocupación sobre el fenómeno del secuestro en la nación africana. En el primer evento, un grupo de 100 estudiantes que habían sido secuestrados en un internado católico del noroeste de Nigeria fueron liberados tras un periodo de 15 días. Desde la tragedia de Chibok en 2014, los ataques han proliferado, atraídos por beneficios económicos.
En un segundo incidente, al menos 15 personas fueron secuestradas mientras asistían a un servicio religioso en la Iglesia Evangélica First Evangelical Church Winning All. Este tipo de violencia ha causado más de 700 muertes en Nigeria desde julio de 2024 hasta junio de 2025. El presidente Bola Tinubu ha reaccionado estableciendo un estado de emergencia nacional y reforzando el despliegue de tropas en áreas críticas para enfrentar la violencia generada por Boko Haram y las bandas criminales responsables de secuestros.
La situación en Nigeria plantea serios desafíos a la convivencia y la seguridad en un país con más de 230 millones de habitantes y una notable diversidad religiosa, mostrando la urgencia de abordar la violencia y el conflicto en busca de la paz y la seguridad para sus ciudadanos.
En un segundo incidente, al menos 15 personas fueron secuestradas mientras asistían a un servicio religioso en la Iglesia Evangélica First Evangelical Church Winning All. Este tipo de violencia ha causado más de 700 muertes en Nigeria desde julio de 2024 hasta junio de 2025. El presidente Bola Tinubu ha reaccionado estableciendo un estado de emergencia nacional y reforzando el despliegue de tropas en áreas críticas para enfrentar la violencia generada por Boko Haram y las bandas criminales responsables de secuestros.
La situación en Nigeria plantea serios desafíos a la convivencia y la seguridad en un país con más de 230 millones de habitantes y una notable diversidad religiosa, mostrando la urgencia de abordar la violencia y el conflicto en busca de la paz y la seguridad para sus ciudadanos.