Progresista 30%Conservador 70%
María Alejandra Díaz, abogada disidente del chavismo, llega a Colombia tras recibir asilo político y denunciar persecución
La abogada agradeció el apoyo del gobierno colombiano y destacó las dificultades enfrentadas por el régimen de Nicolás Maduro.
Publicado: 18 de agosto de 2025, 11:42
María Alejandra Díaz, reconocida abogada disidente del chavismo, informó el pasado 18 de agosto que ha logrado salir de Venezuela y se encuentra refugiada en Colombia, tras recibir asilo político del gobierno colombiano. Díaz había denunciado anteriormente que el gobierno de Nicolás Maduro se había negado a otorgarle un salvoconducto, complicando su salida del país.
La abogada comunicó su situación a través de una publicación en X, confirmando que había salido de la residencia de la Embajada de Colombia en Caracas, gracias a las gestiones del presidente colombiano Gustavo Petro y otros funcionarios. El gobierno colombiano había otorgado asilo diplomático a Díaz, quien había llegado a la embajada colombiana alegando ser víctima de persecución política.
Díaz, quien fue presidenta de la Comisión de Derechos Humanos en Venezuela, pidió respeto a su condición de asilada, subrayando que la negativa del gobierno venezolano para otorgarle un salvoconducto es una prueba de la represión que sufre la disidencia. Su llegada a Colombia resalta la crisis de derechos humanos en Venezuela y las dificultades que enfrentan aquellos que se oponen al régimen de Maduro.
La abogada comunicó su situación a través de una publicación en X, confirmando que había salido de la residencia de la Embajada de Colombia en Caracas, gracias a las gestiones del presidente colombiano Gustavo Petro y otros funcionarios. El gobierno colombiano había otorgado asilo diplomático a Díaz, quien había llegado a la embajada colombiana alegando ser víctima de persecución política.
Díaz, quien fue presidenta de la Comisión de Derechos Humanos en Venezuela, pidió respeto a su condición de asilada, subrayando que la negativa del gobierno venezolano para otorgarle un salvoconducto es una prueba de la represión que sufre la disidencia. Su llegada a Colombia resalta la crisis de derechos humanos en Venezuela y las dificultades que enfrentan aquellos que se oponen al régimen de Maduro.