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Los alquileres a revisar con el índice del INE suavizan su subida en marzo al 1,98%
Desde 2025, el Instituto Nacional de Estadística (INE) se encarga de definir el índice de referencia de arrendamiento para evitar incrementos desproporcionados.
Publicado: 11 de abril de 2025, 16:28
Los alquileres que se revisen ahora podrán subir hasta un 1,98%, según el nuevo índice de referencia publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este dato, correspondiente a marzo de 2025, representa la cifra más baja que ha publicado el INE hasta la fecha, siendo la primera vez que se encuentra por debajo del 2%. Las subidas de alquiler en meses anteriores fueron superiores, y la ley de vivienda establece que el INE se encargue de definir este índice para contener los incrementos de precios y evitar que se disparen debido a la inflación.
La inflación en marzo se situó en el 2,3%, lo que, al ser superior al nuevo índice, genera preocupación entre diversos actores del mercado. Históricamente, los alquileres se actualizaban según el Índice de Precios de Consumo (IPC), pero la invasión de Ucrania en 2022 llevó al Gobierno a limitar esas subidas. Con el nuevo índice, las actualizaciones del alquiler se realizan anualmente, permitiendo una subida máxima una vez al año, aunque con opciones de prórroga en ciertos casos.
Desde la publicación de este índice, se ha cuestionado la medida, argumentando que puede limitar la capacidad de actualización de las rentas y presionar al alza en un mercado regulado. Además, la coexistencia de dos índices distintos podría confundir a arrendadores e inquilinos.
La inflación en marzo se situó en el 2,3%, lo que, al ser superior al nuevo índice, genera preocupación entre diversos actores del mercado. Históricamente, los alquileres se actualizaban según el Índice de Precios de Consumo (IPC), pero la invasión de Ucrania en 2022 llevó al Gobierno a limitar esas subidas. Con el nuevo índice, las actualizaciones del alquiler se realizan anualmente, permitiendo una subida máxima una vez al año, aunque con opciones de prórroga en ciertos casos.
Desde la publicación de este índice, se ha cuestionado la medida, argumentando que puede limitar la capacidad de actualización de las rentas y presionar al alza en un mercado regulado. Además, la coexistencia de dos índices distintos podría confundir a arrendadores e inquilinos.