Linchamiento y asesinato de una mujer en Nigeria tras acusaciones de blasfemia suscita condena internacional

En un trágico suceso ocurrido el pasado sábado en la aldea de Kasuwan-Garba, en la localidad de Mariga, Nigeria, una mujer identificada como Amaye, quien era una reconocida vendedora ambulante de comida, fue linchada y quemada viva por una multitud tras ser acusada de blasfemar contra el islam. Los testigos relataron que, tras ser entregada a las autoridades, la multitud exigió su ejecución inmediata, lo que resultó en su linchamiento. La policía local declaró que Amaye supuestamente realizó declaraciones consideradas ofensivas durante una conversación con un joven. Este acto ha provocado una condena de Amnistía Internacional, que ha pedido una investigación y la detención de los responsables.

Los linchamientos por acusaciones de blasfemia han sido un problema creciente en Nigeria, con cientos de víctimas en los últimos años, especialmente en el norte del país. Amnistía Internacional recordó otros incidentes similares, como el caso de Deborah Samuel Yakubu en 2022, lo que subraya la cultura de impunidad y violencia en la región. Este acontecimiento ha generado conmoción local e internacional, cuestionando la protección de los derechos humanos y la efectividad de las autoridades. Los linchamientos de personas acusadas de blasfemar o de otros delitos, como robo o brujería, han sucedido de manera relativamente frecuente en Nigeria, a menudo respaldados por clérigos que incitan a la violencia.