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Libertad para propietarios e empleado de empresa de desocupación tras echar a inquilino moroso en Palma
Un inquilino que dejó de pagar su alquiler fue desahuciado de manera violenta, provocando la intervención policial.
Publicado: 26 de julio de 2025, 19:31
En Palma, la Policía Nacional detuvo a dos propietarios de un piso y a un empleado de una empresa de desocupación, tras la denuncia de un inquilino que afirmaba haber sido echado de su hogar de manera violenta. Este incidente se produjo el pasado jueves cuando el inquilino, un hombre de 41 años, dejó de pagar su alquiler y comenzó a tener conflictos con sus compañeros de vivienda y vecinos, según relataron los dueños del inmueble.
Los propietarios, una pareja de ciudadanos franceses de 57 y 59 años, y el empleado de desocupación, un rumano de 37 años, irrumpieron en el apartamento del inquilino con la intención de desalojarlo, sacaron sus pertenencias e incluso cambiaron la cerradura para evitar su regreso. Según el atestado policial, el afectado se encontraba en el inmueble cuando los sospechosos entraron "de forma intimidatoria", lo que llevó al hombre a llamar a la policía.
Posteriormente, los detenidos fueron trasladados ante el juez de guardia, donde todos decidieron acogerse a su derecho a no declarar. Finalmente, tras la comparecencia en el juzgado, los propietarios y el empleado de la empresa de desocupación quedaron en libertad con cargos, aunque el caso sigue su curso judicial. Esta sucesión de eventos destaca la problemática del alquiler en las ciudades, poniendo en la mira los métodos de desalojo que algunas empresas de "desocupación" aplican.
Los propietarios, una pareja de ciudadanos franceses de 57 y 59 años, y el empleado de desocupación, un rumano de 37 años, irrumpieron en el apartamento del inquilino con la intención de desalojarlo, sacaron sus pertenencias e incluso cambiaron la cerradura para evitar su regreso. Según el atestado policial, el afectado se encontraba en el inmueble cuando los sospechosos entraron "de forma intimidatoria", lo que llevó al hombre a llamar a la policía.
Posteriormente, los detenidos fueron trasladados ante el juez de guardia, donde todos decidieron acogerse a su derecho a no declarar. Finalmente, tras la comparecencia en el juzgado, los propietarios y el empleado de la empresa de desocupación quedaron en libertad con cargos, aunque el caso sigue su curso judicial. Esta sucesión de eventos destaca la problemática del alquiler en las ciudades, poniendo en la mira los métodos de desalojo que algunas empresas de "desocupación" aplican.