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Liberan a Kilmar Ábrego, un salvadoreño deportado por error, tras decisión judicial en EE.UU.
La justicia de Maryland ordena la liberación de Abrego mientras la Casa Blanca planea apelar la decisión, en medio de un contexto legal complejo.
Publicado: 15 de diciembre de 2025, 02:52
Kilmar Ábrego, un salvadoreño de 30 años, ha sido liberado tras varios meses de detención en Estados Unidos debido a una serie de eventos legales que han convertido su caso en un símbolo de los desafíos en la política migratoria actual. Un juez federal de Maryland ha ordenado su liberación inmediata, argumentando que el gobierno estadounidense carece de un fundamento legal válido para su detención y posible deportación, ya que nunca se emitió una orden formal en este sentido.
Ábrego fue originalmente deportado por error a El Salvador en marzo de 2025, donde fue encerrado en una prisión de alta seguridad. Su abogado ha argumentado que su reclusión no está justificada y que se trataba de un castigo. El juez Paula Xinis, al ordenar su liberación, destacó que la detención era ilegal y violatoria de los derechos fundamentales. Sin embargo, enfrenta ciertas condiciones como arresto domiciliario y monitoreo electrónico debido a un proceso penal persistente en su contra relacionado con cargos que él niega.
A pesar de su liberación, la administración Trump ha declarado su intención de apelar la decisión del tribunal y ha propuesto que, en lugar de retornar a El Salvador, sea deportado a países africanos, aunque estos han mostrado ambigüedad respecto a recibirlo. Este caso resalta no solo los desafíos personales de Ábrego, sino también las complicaciones de un sistema migratorio en debate en Estados Unidos.
Ábrego fue originalmente deportado por error a El Salvador en marzo de 2025, donde fue encerrado en una prisión de alta seguridad. Su abogado ha argumentado que su reclusión no está justificada y que se trataba de un castigo. El juez Paula Xinis, al ordenar su liberación, destacó que la detención era ilegal y violatoria de los derechos fundamentales. Sin embargo, enfrenta ciertas condiciones como arresto domiciliario y monitoreo electrónico debido a un proceso penal persistente en su contra relacionado con cargos que él niega.
A pesar de su liberación, la administración Trump ha declarado su intención de apelar la decisión del tribunal y ha propuesto que, en lugar de retornar a El Salvador, sea deportado a países africanos, aunque estos han mostrado ambigüedad respecto a recibirlo. Este caso resalta no solo los desafíos personales de Ábrego, sino también las complicaciones de un sistema migratorio en debate en Estados Unidos.