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León XIV y Carlos III marcan un hito histórico al rezar juntos en la Capilla Sixtina casi 500 años después de la ruptura anglicana.
La oración ecuménica, centrada en la defensa del medio ambiente, reúne a líderes religiosos y royales en un momento significativo de reconciliación.
Publicado: 23 de octubre de 2025, 12:02
Este jueves, la Capilla Sixtina fue testigo de un acontecimiento histórico sin precedentes: por primera vez en casi 500 años, el Papa León XIV y el Rey Carlos III de Inglaterra rezaron juntos. La ceremonia, celebrada el 23 de octubre, estuvo marcada por un profundo simbolismo de reconciliación entre la Iglesia católica y la Comunión anglicana, en un acto que también destacaba la preocupación actual por la crisis climática. La ceremonia se centró en la protección del medio ambiente, simbolizando un esfuerzo por fortalecer los lazos entre ambas instituciones religiosas. Durante el servicio, que duró 20 minutos, los dos líderes religiosos compartieron una plegaria en inglés y latín, bajo los frescos históricos de Miguel Ángel que adornan la Capilla Sixtina.
Previo a la oración, León XIV y los reyes británicos tuvieron una reunión privada de aproximadamente 45 minutos, donde intercambiaron regalos que simbolizan la buena voluntad. El reverendo anglicano James Hawkey describió la ceremonia como una “sanación de la historia”, resaltando su relevancia en las relaciones interreligiosas modernas. Este momento de oración conjunta abre la puerta a futuras colaboraciones y celebraciones entre ambas religiones.
La elección de la defensa del medio ambiente como tema para la oración refleja la responsabilidad compartida que ambas instituciones sienten hacia el cuidado del mundo. Carlos III, quien ha mostrado un interés evidente en la ecología, coincide en esta prioridad con el Papa, quien ha hecho de la protección de la naturaleza una de las bases de su pontificado. La ceremonia incluyó música tradicional, posiblemente de Thomas Tallis, resaltando la importancia del evento no solo en términos religiosos, sino también sociales y medioambientales.
Además, los reyes fueron honrados con títulos simbólicos: Carlos III fue nombrado Hermano Real de San Pablo en la Basílica de San Pablo Extramuros, mientras que León XIV se convierte en Cofrade Papal de la Capilla de San Jorge en Windsor. Esta visita de Carlos III y la Reina Camila marca un punto de inflexión en las relaciones entre Londres y la Santa Sede, simbolizando la voluntad de superar las heridas del pasado y fomentar un diálogo interreligioso más fuerte.
Previo a la oración, León XIV y los reyes británicos tuvieron una reunión privada de aproximadamente 45 minutos, donde intercambiaron regalos que simbolizan la buena voluntad. El reverendo anglicano James Hawkey describió la ceremonia como una “sanación de la historia”, resaltando su relevancia en las relaciones interreligiosas modernas. Este momento de oración conjunta abre la puerta a futuras colaboraciones y celebraciones entre ambas religiones.
La elección de la defensa del medio ambiente como tema para la oración refleja la responsabilidad compartida que ambas instituciones sienten hacia el cuidado del mundo. Carlos III, quien ha mostrado un interés evidente en la ecología, coincide en esta prioridad con el Papa, quien ha hecho de la protección de la naturaleza una de las bases de su pontificado. La ceremonia incluyó música tradicional, posiblemente de Thomas Tallis, resaltando la importancia del evento no solo en términos religiosos, sino también sociales y medioambientales.
Además, los reyes fueron honrados con títulos simbólicos: Carlos III fue nombrado Hermano Real de San Pablo en la Basílica de San Pablo Extramuros, mientras que León XIV se convierte en Cofrade Papal de la Capilla de San Jorge en Windsor. Esta visita de Carlos III y la Reina Camila marca un punto de inflexión en las relaciones entre Londres y la Santa Sede, simbolizando la voluntad de superar las heridas del pasado y fomentar un diálogo interreligioso más fuerte.