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La Unión Europea se compromete a reducir emisiones un 90% para 2040 en medio del colapso industrial
El pacto, que incluye concesiones a gobiernos reacios, se presenta como una oportunidad para reindustrializar Europa de manera sostenible.
Publicado: 10 de diciembre de 2025, 17:15
La Unión Europea (UE) ha alcanzado un acuerdo crucial para reducir las emisiones netas de gases de efecto invernadero en un 90% para el año 2040 en comparación con los niveles de 1990. A pesar de las intenciones de descarbonización, la industria europea enfrenta un periodo crítico, donde la falta de reformas podría derivar en un colapso. El pacto permite utilizar hasta un 5% de créditos internacionales para compensar emisiones, buscando captar la participación de países reacios como Italia, Polonia y Francia.
Mientras el Pacto Verde de la UE comienza a mostrar resultados y convertirse en un motor de crecimiento, la industria europea ha perdido más de 2,3 millones de empleos en manufactura desde 2008. Enfrenta retos significativos por la creciente dependencia de importaciones y la competencia internacional. Es crucial que la UE combine su estrategia de reducción de emisiones con inversiones y reformas industriales efectivas para fortalecer su autonomía estratégica.
El éxito de esta iniciativa dependerá de la capacidad de los países miembros para colaborar en la implementación de reformas que no solo reduzcan las emisiones sino que revitalicen la base industrial del continente, asegurando un futuro sostenible y evitando un colapso industrial con repercusiones devastadoras.
Mientras el Pacto Verde de la UE comienza a mostrar resultados y convertirse en un motor de crecimiento, la industria europea ha perdido más de 2,3 millones de empleos en manufactura desde 2008. Enfrenta retos significativos por la creciente dependencia de importaciones y la competencia internacional. Es crucial que la UE combine su estrategia de reducción de emisiones con inversiones y reformas industriales efectivas para fortalecer su autonomía estratégica.
El éxito de esta iniciativa dependerá de la capacidad de los países miembros para colaborar en la implementación de reformas que no solo reduzcan las emisiones sino que revitalicen la base industrial del continente, asegurando un futuro sostenible y evitando un colapso industrial con repercusiones devastadoras.