La relación entre Acciona y Servinabar bajo la lupa por su vinculación con Santos Cerdán y la posible trama de corrupción

En los últimos días, la relación entre Acciona y Servinabar, empresa propiedad de Santos Cerdán, ha cobrado protagonismo debido a las investigaciones por posibles irregularidades en la adjudicación de contratos públicos. Manuel García Alconchel, exdirectivo de Acciona, ha declarado en el Tribunal Supremo que la relación entre ambas compañías existía desde antes de su llegada, insinuando que el exdirector de Construcción, Justo Vicente Pellegrini, lo introdujo a Servinabar. Además, la segunda noticia revela un correo de Acciona que sugiere que Servinabar no participaba activamente en los proyectos, lo que ha levantado dudas sobre la justificación de los pagos que recibía.

El hallazgo de correos interceptados señala que Servinabar cobraba un porcentaje de los contratos a pesar de no involucrarse directamente en los trabajos, lo que genera suspicacias sobre la relación con Cerdán. La investigación apunta a que la firma de contratos podría formar parte de una red de corrupción donde Cerdán pudo haber utilizado su influencia en el Ministerio de Transportes para favorecer a su empresa. A medida que avanza la investigación, la situación se complica para los directivos de Acciona y figuras políticas involucradas, ya que los jueces y fiscales comienzan a explorar la conexión entre la asignación de obras públicas y relaciones personales, buscando esclarecer la responsabilidad de los implicados en esta trama.

Este caso muestra cómo las investigaciones judiciales están involucrando a varias figuras importantes en la política y la construcción en España, revelando la complejidad de los vínculos entre intereses empresariales y decisiones políticas.