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La publicación de las cartas de Maruja Mallo ofrece una nueva perspectiva sobre su vida y obra como figura emblemática del arte español
El epistolario de la pintora revela detalles sobre su trayectoria y conexiones con otros artistas de su época.
Publicado: 13 de diciembre de 2025, 23:05
Recientemente ha sido publicado el libro "Cartas de Maruja Mallo", que reúne una selección esencial de la correspondencia de la renombrada artista española, proporcionando una visión única de su vida y su pensamiento. Este trabajo, editado por Guillermo de Osma y con la colaboración de Miriam Sainz de la Maza, es un recurso invaluable tanto para el estudio académico como para el público general interesado en la historia del arte español del siglo XX.
Las cartas de Mallo, muchas de las cuales son inéditas, abarcan un periodo crucial del Madrid literario y artístico de las décadas de 1920 y 1930. En ellas, Mallo comparte sus experiencias y conexiones con figuras prominentes de la Generación del 27, como Salvador Dalí, Federico García Lorca y Luis Buñuel. Este epistolario no solo documenta su carrera artística, sino que también ofrece un contexto socio-cultural de su época, permitiendo a los lectores sumergirse en un momento de gran efervescencia creativa.
En la correspondencia, Maruja Mallo se presenta como una observadora aguda de su entorno. En una carta a Ortega y Gasset de 1931, expresa sus impresiones sobre París, su desdén por el arte de la época y su fascinación por la dinámica social de la ciudad. Estas cartas no solo revelan su vida profesional, sino también sus inquietudes personales y su interacción con el mundo que la rodeaba.
Las cartas de Mallo, muchas de las cuales son inéditas, abarcan un periodo crucial del Madrid literario y artístico de las décadas de 1920 y 1930. En ellas, Mallo comparte sus experiencias y conexiones con figuras prominentes de la Generación del 27, como Salvador Dalí, Federico García Lorca y Luis Buñuel. Este epistolario no solo documenta su carrera artística, sino que también ofrece un contexto socio-cultural de su época, permitiendo a los lectores sumergirse en un momento de gran efervescencia creativa.
En la correspondencia, Maruja Mallo se presenta como una observadora aguda de su entorno. En una carta a Ortega y Gasset de 1931, expresa sus impresiones sobre París, su desdén por el arte de la época y su fascinación por la dinámica social de la ciudad. Estas cartas no solo revelan su vida profesional, sino también sus inquietudes personales y su interacción con el mundo que la rodeaba.