La propuesta de remodelación del Gobierno de Yolanda Díaz genera debate interno y cautela entre los socios de Sumar

La reciente petición de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, para que se realice una profunda remodelación del Gobierno ha calado en el seno de la coalición de izquierdas Sumar, generando un debate interno significativo que ha puesto de manifiesto las tensiones entre sus miembros. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha reaccionado con cautela a la propuesta, subrayando que no está claro si esta iniciativa es la mejor forma de abordar la situación actual del Gobierno. Page cuestionó si la decisión de Díaz podría traer consecuencias inesperadas, advirtiendo que la remodelación del Ejecutivo puede provocar inestabilidad en un contexto ya delicado.

Antonio Maíllo, coordinador federal de Izquierda Unida, ha dejado claro que la petición de Díaz no formó parte de un acuerdo consensuado dentro de Sumar, sino que fue un movimiento unilateral. Aunque comparten el diagnóstico de la ineficiencia del PSOE ante los escándalos, no están considerando abandonar el Gobierno y ven la necesidad de negociar soluciones a la crisis actual. Esta diversidad de opiniones ha enriquecido la discusión sobre las posibles reformas necesarias.

Por otro lado, el Partido Popular ha decidido personarse como acusación en las investigaciones sobre los escándalos de corrupción que afectan a ex miembros del PSOE, criticando la falta de respuestas de Sánchez y presionando a los miembros de Sumar para que dimitan si no pueden apoyar un Gobierno con serias acusaciones. Esta situación puede influir en las decisiones que tomen las fuerzas de la coalición.