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La ONU denuncia la masacre de más de 1,000 civiles en Sudán durante el ataque al campo de desplazados de Zamzam.
Las Fuerzas de Apoyo Rápido imponen una crítica situación humanitaria y enfrentan acusaciones de crímenes de guerra por parte de la ONU.
Publicado: 19 de diciembre de 2025, 00:56
En abril de 2025, un ataque perpetrado por las Fuerzas de Apoyo Rápido resultó en la muerte de más de mil civiles en el campo de desplazados de Zamzam, en Darfur. La ONU ha calificado estos ataques como crímenes de guerra, documentando más de 1,013 muertes en tres días, incluidas 319 ejecuciones sumarias. Las RSF bloquearon el suministro humanitario, exacerbando la crisis.
Testigos y supervivientes han relatado situaciones alarmantes, incluyendo registros casa por casa y violaciones sistemáticas de derechos humanos, lo que ha llevado al Alto Comisionado de la ONU a pedir intervención internacional. La situación se complica con intervenciones externas, y se enfatiza la necesidad de una respuesta global para aliviar el sufrimiento de los afectados.
Este contexto no es aislado, ya que un ataque posterior en Al Fasher también presenta violaciones graves. La ONU ha instado a una investigación imparcial para asegurar justicia y prevenir futuros incidentes, reflejando la crítica crisis humanitaria en Sudán.
Testigos y supervivientes han relatado situaciones alarmantes, incluyendo registros casa por casa y violaciones sistemáticas de derechos humanos, lo que ha llevado al Alto Comisionado de la ONU a pedir intervención internacional. La situación se complica con intervenciones externas, y se enfatiza la necesidad de una respuesta global para aliviar el sufrimiento de los afectados.
Este contexto no es aislado, ya que un ataque posterior en Al Fasher también presenta violaciones graves. La ONU ha instado a una investigación imparcial para asegurar justicia y prevenir futuros incidentes, reflejando la crítica crisis humanitaria en Sudán.