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La muerte de Isak Andic, fundador de Mango, se reabre como posible homicidio tras un análisis del teléfono de su hijo
La investigación que inicialmente consideró un accidente en la montaña, ahora indaga en la implicación de Jonathan Andic.
Publicado: 18 de octubre de 2025, 06:42
La muerte de Isak Andic, el fundador de Mango, ha tomado un giro inesperado, pasando de ser considerada un accidente a ser investigada como un posible homicidio, centrando el interés en Jonathan Andic, su hijo mayor. Inicialmente, las autoridades habían determinado que la muerte fue resultado de un resbalón en un sendero, pero la jueza ha reabierto el caso tras nuevos datos que sugieren un posible crimen.
Un aspecto crucial en la investigación es el análisis del teléfono móvil de Jonathan Andic, que las autoridades están examinando para hallar mensajes y señales que puedan esclarecer lo sucedido. Jonathan ha sido solicitado para entregar su teléfono, siendo las pruebas obtenidas de este dispositivo potencialmente decisivas en el caso. La familia Andic ha expresado su deseo de probar la inocencia de Jonathan y ha mantenido una postura de respeto hacia el proceso judicial.
A medida que la investigación avanza, se han revelado detalles sobre la complicada relación entre Jonathan y su padre, así como la falta de evidencia directa respecto a los eventos que llevaron a la fatal caída. En particular, las malas relaciones familiares han sido un foco de atención, especialmente en el marco de los conflictos internos por la herencia que ha dejado Isak Andic. El juzgado de instrucción número 5 de Martorell investiga la dinamica familiar, donde se ha reportado que la actual pareja de Isak, Estefania Knuth, no estaría satisfecha con su parte de la herencia, y ha habido intentos de negociación con los hijos para alcanzar un acuerdo más favorable para ella.
Otra línea de investigación está relacionada con las decisiones de gestión empresarial previas a su muerte. Isak Andic había apartado a su hijo Jonathan de la dirección de Mango en 2015 tras dos años consecutivos de pérdidas, lo que también había afectado la relación entre padre e hijo. Esta decisión, que se tomó en un contexto ya tenso, y el hecho de que Jonathan se casó poco antes de la muerte de su padre, añaden más complejidad a la situación.
La comunidad empresarial y la sociedad española observan de cerca los progresos de la investigación, que podría cambiar la percepción sobre un trágico suceso que marcó a una de las marcas más emblemáticas de España. La investigación, que inicialmente consideraba la muerte de Isak Andic como un accidente, ahora se centra en esclarecer si existió algún tipo de irregularidad o delito relacionado con su fallecimiento.
Un aspecto crucial en la investigación es el análisis del teléfono móvil de Jonathan Andic, que las autoridades están examinando para hallar mensajes y señales que puedan esclarecer lo sucedido. Jonathan ha sido solicitado para entregar su teléfono, siendo las pruebas obtenidas de este dispositivo potencialmente decisivas en el caso. La familia Andic ha expresado su deseo de probar la inocencia de Jonathan y ha mantenido una postura de respeto hacia el proceso judicial.
A medida que la investigación avanza, se han revelado detalles sobre la complicada relación entre Jonathan y su padre, así como la falta de evidencia directa respecto a los eventos que llevaron a la fatal caída. En particular, las malas relaciones familiares han sido un foco de atención, especialmente en el marco de los conflictos internos por la herencia que ha dejado Isak Andic. El juzgado de instrucción número 5 de Martorell investiga la dinamica familiar, donde se ha reportado que la actual pareja de Isak, Estefania Knuth, no estaría satisfecha con su parte de la herencia, y ha habido intentos de negociación con los hijos para alcanzar un acuerdo más favorable para ella.
Otra línea de investigación está relacionada con las decisiones de gestión empresarial previas a su muerte. Isak Andic había apartado a su hijo Jonathan de la dirección de Mango en 2015 tras dos años consecutivos de pérdidas, lo que también había afectado la relación entre padre e hijo. Esta decisión, que se tomó en un contexto ya tenso, y el hecho de que Jonathan se casó poco antes de la muerte de su padre, añaden más complejidad a la situación.
La comunidad empresarial y la sociedad española observan de cerca los progresos de la investigación, que podría cambiar la percepción sobre un trágico suceso que marcó a una de las marcas más emblemáticas de España. La investigación, que inicialmente consideraba la muerte de Isak Andic como un accidente, ahora se centra en esclarecer si existió algún tipo de irregularidad o delito relacionado con su fallecimiento.