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La muerte de Haitam en Torremolinos genera polémica y protestas sobre el uso de la fuerza policial
El fallecimiento de un hombre tras ser reducido con pistolas táser por la policía desata un debate sobre la actuación policial y el racismo.
Publicado: 16 de diciembre de 2025, 18:36
En un trágico incidente el pasado 7 de diciembre, Haitam Mejri, un hombre de 35 años, falleció en un locutorio de Torremolinos, Málaga, después de recibir descargas de una pistola táser por parte de la policía. Este evento ha desatado una ola de controversia y protestas en la comunidad local, así como un debate sobre la intervención policial y el uso de armas eléctricas.
Según el relato de diversos testimonios, Haitam se encontraba en el locutorio para cargar su teléfono móvil, ya que se había quedado sin batería. Durante el tiempo que estuvo dentro, surgió un conflicto con el propietario del establecimiento, quien decidió llamar al 112 alegando que estaba siendo víctima de un robo. La versión policial, sin embargo, sostiene que Haitam llegó al lugar en un "avanzado estado de agitación" y que fue necesario el uso de varias patrullas para controlarlo, describiéndolo como un individuo potencialmente violento.
Los familiares de Haitam, que tienen acceso a varios vídeos de la intervención, rechazan la narrativa policial y afirman que no hay evidencias que respalden una actitud agresiva por parte de Haitam en el momento de su detención. A lo largo de los días posteriores al fallecimiento, se llevaron a cabo múltiples concentraciones en Torremolinos donde se exigía justicia y se denunciaba el abuso de la fuerza por parte de la policía.
Según el relato de diversos testimonios, Haitam se encontraba en el locutorio para cargar su teléfono móvil, ya que se había quedado sin batería. Durante el tiempo que estuvo dentro, surgió un conflicto con el propietario del establecimiento, quien decidió llamar al 112 alegando que estaba siendo víctima de un robo. La versión policial, sin embargo, sostiene que Haitam llegó al lugar en un "avanzado estado de agitación" y que fue necesario el uso de varias patrullas para controlarlo, describiéndolo como un individuo potencialmente violento.
Los familiares de Haitam, que tienen acceso a varios vídeos de la intervención, rechazan la narrativa policial y afirman que no hay evidencias que respalden una actitud agresiva por parte de Haitam en el momento de su detención. A lo largo de los días posteriores al fallecimiento, se llevaron a cabo múltiples concentraciones en Torremolinos donde se exigía justicia y se denunciaba el abuso de la fuerza por parte de la policía.