Progresista 100%Conservador 0%
La huelga de bomberos forestales en Madrid cumple 150 días con protestas y enfrentamientos policiales por sus derechos laborales
Los bomberos forestales exigen mejoras laborales mientras enfrentan represión policial en su lucha por un nuevo convenio colectivo.
Publicado: 12 de diciembre de 2025, 03:49
La huelga de los bomberos forestales de la Comunidad de Madrid ha alcanzado los 150 días, convirtiéndose en un conflicto laboral prolongado que ha resultado en tensiones significativas con la policía. Los manifestantes se concentraron frente a la sede del grupo Tragsa, donde se enfrentaron a cargas policiales que dejaron a varios heridos y al menos dos detenidos. Además, los bomberos han expresado su indignación por los enfrentamientos, acusando a la policía de actuar con 'actitud violenta'.
Los bomberos han reiterado sus demandas de un nuevo convenio colectivo, que está caducado desde 2012, así como el fin de la temporalidad en sus contratos y medidas adecuadas de protección frente a riesgos laborales, insistiendo que sus condiciones han sido ignoradas por años. La situación se complica con la falta de negociación por parte de Tragsa, lo que ha generado uno de los conflictos más largos en la historia reciente del sector público.
Este conflicto no solo afecta a los trabajadores, sino también al funcionamiento del servicio de extinción de incendios en la región. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha calificado la huelga de 'política', desatendiendo las preocupaciones laborales. Los bomberos sostienen que su situación pone en riesgo la efectividad de la lucha contra incendios forestales, resaltando la crítica necesidad de cambios en la política laboral de la Comunidad de Madrid.
Los bomberos han reiterado sus demandas de un nuevo convenio colectivo, que está caducado desde 2012, así como el fin de la temporalidad en sus contratos y medidas adecuadas de protección frente a riesgos laborales, insistiendo que sus condiciones han sido ignoradas por años. La situación se complica con la falta de negociación por parte de Tragsa, lo que ha generado uno de los conflictos más largos en la historia reciente del sector público.
Este conflicto no solo afecta a los trabajadores, sino también al funcionamiento del servicio de extinción de incendios en la región. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha calificado la huelga de 'política', desatendiendo las preocupaciones laborales. Los bomberos sostienen que su situación pone en riesgo la efectividad de la lucha contra incendios forestales, resaltando la crítica necesidad de cambios en la política laboral de la Comunidad de Madrid.