Progresista 56.5%Conservador 43.5%
La histórica visita de Ahmad Al Sharaa a la Casa Blanca marca un cambio significativo en las relaciones entre Siria y Estados Unidos
Ahmad Al Sharaa se convierte en el primer presidente sirio recibido en el Despacho Oval, simbolizando una nueva era en la diplomacia.
Publicado: 11 de noviembre de 2025, 07:47
Ahmad Al Sharaa, quien anteriormente fue conocido como Abu Mohamed Al Jolani y líder de Al Qaeda en Siria, ha realizado una visita histórica a la Casa Blanca, siendo el primer presidente sirio en recibir tal reconocimiento. Este encuentro con Donald Trump se produce en un contexto de cambios geopoliticos significativos tras la caída del régimen de Bashar al Asad.
Trump destacó las capacidades de Al Sharaa, describiéndolo como un 'líder fuerte' que podría llevar a Siria hacia un futuro exitoso. Este diálogo marca un hito en las relaciones entre Washington y Damasco, que han estado marcadas por décadas de tensión y aislamiento mutuo. El cambio en la postura de EE.UU. hacia Siria es evidente, ya que Al Sharaa, anteriormente considerado un terrorista, ahora es visto como un aliado en la lucha contra el Estado Islámico.
Sin embargo, hay tensiones en Washington, con miembros del Congreso expresando preocupaciones sobre la normalización prematura de relaciones con Siria. La grave situación humanitaria y la necesidad de garantizar los derechos humanos son cuestiones críticas que el nuevo liderazgo deberá abordar. Además, el acercamiento a Siria podría modificar las dinámicas de poder en Oriente Medio, afectando su relación con actores como Irán y Hizbulá.
Trump destacó las capacidades de Al Sharaa, describiéndolo como un 'líder fuerte' que podría llevar a Siria hacia un futuro exitoso. Este diálogo marca un hito en las relaciones entre Washington y Damasco, que han estado marcadas por décadas de tensión y aislamiento mutuo. El cambio en la postura de EE.UU. hacia Siria es evidente, ya que Al Sharaa, anteriormente considerado un terrorista, ahora es visto como un aliado en la lucha contra el Estado Islámico.
Sin embargo, hay tensiones en Washington, con miembros del Congreso expresando preocupaciones sobre la normalización prematura de relaciones con Siria. La grave situación humanitaria y la necesidad de garantizar los derechos humanos son cuestiones críticas que el nuevo liderazgo deberá abordar. Además, el acercamiento a Siria podría modificar las dinámicas de poder en Oriente Medio, afectando su relación con actores como Irán y Hizbulá.