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La Guardia Civil investiga a cinco personas por maltrato animal al cortar las crestas de gallos de pelea en Tenerife
La operación revela un criadero clandestino con intervenciones veterinarias no autorizadas y condiciones de salud precarias para los animales.
Publicado: 10 de agosto de 2025, 11:51
En Tenerife, la Guardia Civil ha iniciado una investigación contra cinco individuos por presunto maltrato animal, tras descubrir un criadero clandestino dedicado a la cría de gallos de pelea. La operación surgió a partir de información que indicaba la existencia de prácticas ilegales, particularmente la realización de cortes a las crestas de los gallos, un procedimiento conocido como decreste-afeitado.
Los agentes sorprendieron a los investigados en el momento en que estaban llevando a cabo estas intervenciones, utilizando tijeras afiladas y punzantes. Durante la inspección del criadero, la Guardia Civil constató que al menos diez gallos jóvenes de la especie Gallus gallus habían sufrido estos procedimientos, presentando evidencia de hemorragias recientes en sus cabezas y en el corral.
Además de los diez gallos recién intervenidos, los agentes encontraron a otros 18 gallos machos que ya habían sido descrestados en épocas anteriores. Las condiciones del criadero revelaron una falta alarmante de estándares sanitarios. Se hallaron diversos productos veterinarios, incluyendo medicamentos que requerían receta y algunos de ellos ya estaban caducados, así como fármacos destinados a uso humano. La falta de recetas para estos medicamentos es un claro indicio del intrusismo en el ejercicio profesional.
Los agentes sorprendieron a los investigados en el momento en que estaban llevando a cabo estas intervenciones, utilizando tijeras afiladas y punzantes. Durante la inspección del criadero, la Guardia Civil constató que al menos diez gallos jóvenes de la especie Gallus gallus habían sufrido estos procedimientos, presentando evidencia de hemorragias recientes en sus cabezas y en el corral.
Además de los diez gallos recién intervenidos, los agentes encontraron a otros 18 gallos machos que ya habían sido descrestados en épocas anteriores. Las condiciones del criadero revelaron una falta alarmante de estándares sanitarios. Se hallaron diversos productos veterinarios, incluyendo medicamentos que requerían receta y algunos de ellos ya estaban caducados, así como fármacos destinados a uso humano. La falta de recetas para estos medicamentos es un claro indicio del intrusismo en el ejercicio profesional.