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La campaña “Minutos de Esperanza” permite a 2.000 presos en Aragón reconectar con sus familias en Navidad
Esta iniciativa de la Pastoral Penitenciaria cobra especial relevancia al permitir a los reclusos sin recursos comunicar su cariño a sus seres queridos.
Publicado: 25 de diciembre de 2025, 01:11
La campaña “Minutos de Esperanza” de la Pastoral Penitenciaria de Aragón ha cobrado protagonismo en este periodo navideño, permitiendo que unas 2.000 personas cumpliendo condena en cárceles como las de Zuera, Daroca o Teruel puedan realizar llamadas a sus familias. Este gesto busca iluminar la Navidad de aquellos reclusos que carecen de recursos económicos. Este año, la campaña marca su noveno aniversario, consolidándose como una tradición que ofrece un pequeño pero significativo consuelo a los internos.
Javier Muñoz, delegado episcopal de la pastoral, resaltó que la generosidad de la ciudadanía ha permitido que, el año pasado, aproximadamente 2.000 personas recluidas en Aragón pudieran conectarse con sus seres queridos. Fray Fernando Ruiz enfatizó la urgencia de mantener viva la esperanza de los internos. Narciso Vioque, responsable del Hogar Mercedario, destacó la necesidad de cambiar la mentalidad social para facilitar la reinserción de los reclusos, afirmando que “la persona tiene derecho a una segunda oportunidad”.
Historias personales, como la de Concepción, madre de un interno, reflejan el impacto emocional de estas llamadas, especialmente en Navidad. La recogida de donativos para la campaña continuará hasta el 20 de diciembre, y se destinará a la compra de tarjetas telefónicas para que los internos puedan llamar a casa durante estas fiestas significativas.
Javier Muñoz, delegado episcopal de la pastoral, resaltó que la generosidad de la ciudadanía ha permitido que, el año pasado, aproximadamente 2.000 personas recluidas en Aragón pudieran conectarse con sus seres queridos. Fray Fernando Ruiz enfatizó la urgencia de mantener viva la esperanza de los internos. Narciso Vioque, responsable del Hogar Mercedario, destacó la necesidad de cambiar la mentalidad social para facilitar la reinserción de los reclusos, afirmando que “la persona tiene derecho a una segunda oportunidad”.
Historias personales, como la de Concepción, madre de un interno, reflejan el impacto emocional de estas llamadas, especialmente en Navidad. La recogida de donativos para la campaña continuará hasta el 20 de diciembre, y se destinará a la compra de tarjetas telefónicas para que los internos puedan llamar a casa durante estas fiestas significativas.