Progresista 40.7%Conservador 59.3%
La abstención de Podemos complica la aprobación de la senda de déficit y pone en riesgo los futuros presupuestos del Gobierno
La decisión de Podemos de abstenerse afecta la aritmética parlamentaria, dejando a Sánchez con pocas opciones ante una nueva derrota.
Publicado: 25 de noviembre de 2025, 13:24
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha confirmado que sus cuatro diputados se abstendrán en la inminente votación de la senda de estabilidad 2026-2028, lo que complicará aún más la situación parlamentaria del Gobierno. Esta decisión ha sido motivada por el rechazo de la formación a que las excepcionales cifras macroeconómicas no se traduzcan en beneficios para las familias. En sus declaraciones, Belarra cuestionó la utilidad de las proyecciones económicas positivas si estas no se reflejan en la vida diaria de los ciudadanos.
La abstención de Podemos, junto con la oposición esperada de otros partidos como el PP, Vox y Junts, hace casi imposible que la senda de déficit se apruebe en el Congreso. Según los cálculos, el Gobierno solo podría aspirar a 167 apoyos, insuficientes frente a los 171 votos del bloque opositor. Este desenlace tiene repercusiones significativas ya que obliga al Gobierno a presentar nuevamente la senda en un plazo de un mes, exponiendo las dificultades que enfrenta el Ejecutivo para lograr sus objetivos económicos.
La senda de déficit tiene como objetivos fijar límites para el déficit público, estableciendo un 2,1 % del PIB para 2026, un 1,8 % para 2027 y un 1,6 % para 2028, formando parte del plan fiscal estructural del Gobierno. Sin embargo, el fracaso en la aprobación de esta senda pone en entredicho la capacidad del Gobierno para llevar a cabo su programa económico y social.
La abstención de Podemos, junto con la oposición esperada de otros partidos como el PP, Vox y Junts, hace casi imposible que la senda de déficit se apruebe en el Congreso. Según los cálculos, el Gobierno solo podría aspirar a 167 apoyos, insuficientes frente a los 171 votos del bloque opositor. Este desenlace tiene repercusiones significativas ya que obliga al Gobierno a presentar nuevamente la senda en un plazo de un mes, exponiendo las dificultades que enfrenta el Ejecutivo para lograr sus objetivos económicos.
La senda de déficit tiene como objetivos fijar límites para el déficit público, estableciendo un 2,1 % del PIB para 2026, un 1,8 % para 2027 y un 1,6 % para 2028, formando parte del plan fiscal estructural del Gobierno. Sin embargo, el fracaso en la aprobación de esta senda pone en entredicho la capacidad del Gobierno para llevar a cabo su programa económico y social.