Progresista 32%Conservador 68%
Jair Bolsonaro enfrenta la culminación de su proceso judicial por intento de golpe de Estado en Brasil.
El ex presidente deberá presentar su defensa ante el Supremo Tribunal Federal mientras estudia sus opciones políticas con el respaldo de su hijo en EE.UU.
Publicado: 23 de julio de 2025, 19:58
La situación del ex presidente brasileño Jair Bolsonaro se ha vuelto crítica ante la inminente decisión del Supremo Tribunal Federal (STF) sobre su futuro. Acusado de liderar una tentativa de golpe de Estado el 8 de enero de 2023, la corte ha dado un plazo de 48 horas para que presente una defensa formal respecto a las violaciones a las medidas cautelares impuestas, incluyendo el uso de una tobillera electrónica y la prohibición de comunicarse con otros investigados.
El magistrado Alexandre de Moraes supervisará el proceso y evaluará rigurosamente la declaración de Bolsonaro, en un juicio que podría resultar en una condena de hasta 43 años. La presión judicial se intensifica, y los abogados de Bolsonaro argumentan que no hubo incumplimiento de las restricciones, mientras que la familia busca apoyo internacional, incluyendo el respaldo de Donald Trump.
A medida que se acercan los plazos judiciales, el panorama político se complica para Bolsonaro, en un escenario donde su inhabilitación como candidato podría marcar el fin de su carrera política, aunque su hijo Eduardo Bolsonaro se posiciona como una figura emergente para el futuro político de Brasil.
El magistrado Alexandre de Moraes supervisará el proceso y evaluará rigurosamente la declaración de Bolsonaro, en un juicio que podría resultar en una condena de hasta 43 años. La presión judicial se intensifica, y los abogados de Bolsonaro argumentan que no hubo incumplimiento de las restricciones, mientras que la familia busca apoyo internacional, incluyendo el respaldo de Donald Trump.
A medida que se acercan los plazos judiciales, el panorama político se complica para Bolsonaro, en un escenario donde su inhabilitación como candidato podría marcar el fin de su carrera política, aunque su hijo Eduardo Bolsonaro se posiciona como una figura emergente para el futuro político de Brasil.