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Israel debate la implementación de la pena de muerte para palestinos bajo el polémico impulso de Itamar Ben-Gvir
Un proyecto de ley genera preocupación internacional por posibles violaciones de derechos humanos y tortura en prisiones israelíes.
Publicado: 22 de diciembre de 2025, 08:41
En el Parlamento israelí, el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, se ha convertido en el rostro visible de una propuesta de ley que busca implementar la pena de muerte para palestinos condenados por asesinar a israelíes. Esta legislación ha levantado alarmas entre organizaciones de derechos humanos y la comunidad internacional, debido a su enfoque discriminatorio.
La ley, que aún necesita ser aprobada en varias lecturas en la Knesset, ha sido criticada por no contemplar la misma pena para israelíes que cometan asesinatos similares y podría estar relacionada con un aumento en las denuncias de abusos y tortura contra prisioneros. Un informe indica que 110 prisioneros palestinos han muerto bajo custodia israelí, lo que plantea serias preocupaciones sobre las condiciones en las cárceles.
La propuesta de pena capital ha generado controversia tanto a nivel nacional como internacional y es vista como un reflejo del fortalecimiento de la extrema derecha en Israel. Grupos de derechos humanos han advertido que su implementación podría consolidar una jerarquía de derechos basada en la identidad nacional, lo que podría intensificar aún más las tensiones en la región.
La ley, que aún necesita ser aprobada en varias lecturas en la Knesset, ha sido criticada por no contemplar la misma pena para israelíes que cometan asesinatos similares y podría estar relacionada con un aumento en las denuncias de abusos y tortura contra prisioneros. Un informe indica que 110 prisioneros palestinos han muerto bajo custodia israelí, lo que plantea serias preocupaciones sobre las condiciones en las cárceles.
La propuesta de pena capital ha generado controversia tanto a nivel nacional como internacional y es vista como un reflejo del fortalecimiento de la extrema derecha en Israel. Grupos de derechos humanos han advertido que su implementación podría consolidar una jerarquía de derechos basada en la identidad nacional, lo que podría intensificar aún más las tensiones en la región.