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Fallece Manolo Lozano, icono del toreo y referente moral en el mundo taurino a los 94 años
La muerte de Manolo Lozano deja un vacío en la tauromaquia, donde su legado perdurará en la memoria de aficionados y toreros.
Publicado: 19 de junio de 2025, 21:50
Hoy, el mundo del toreo se viste de luto tras la muerte de Manolo Lozano a los 94 años, un auténtico emblema del arte taurino cuya vida estuvo marcada por su profunda dedicación y compromiso con la tauromaquia. Su partida representa la pérdida de un referente moral y profesional para varias generaciones, que lo reconocían como un sabio y un guía en el complicado universo taurino.
Manolo Lozano nació en 1930 en Alameda de la Sagra, Toledo, en la histórica familia de toreros Lozano. Desde joven mostró una pasión inquebrantable por el toreo, que lo llevó a convertirse en un destacado novillero. A lo largo de su vida, Lozano desempeñó múltiples roles en el toreo: fue apoderado de grandes figuras, empresario de numerosas plazas en España y América y un astuto ganadero, reconocible por su ética de trabajo y su influjo en el toreo moderno.
En su último día, la plaza de toros de Toledo fue escenario de un homenaje donde se tributó a su memoria, simbolizando no solo un respeto por su legado, sino también la continuidad del arte que él tanto amó. Manolo Lozano dejó un legado de pasión, respeto y sabiduría en el toreo, resonando en los corazones de los aficionados tras su fallecimiento.
Manolo Lozano nació en 1930 en Alameda de la Sagra, Toledo, en la histórica familia de toreros Lozano. Desde joven mostró una pasión inquebrantable por el toreo, que lo llevó a convertirse en un destacado novillero. A lo largo de su vida, Lozano desempeñó múltiples roles en el toreo: fue apoderado de grandes figuras, empresario de numerosas plazas en España y América y un astuto ganadero, reconocible por su ética de trabajo y su influjo en el toreo moderno.
En su último día, la plaza de toros de Toledo fue escenario de un homenaje donde se tributó a su memoria, simbolizando no solo un respeto por su legado, sino también la continuidad del arte que él tanto amó. Manolo Lozano dejó un legado de pasión, respeto y sabiduría en el toreo, resonando en los corazones de los aficionados tras su fallecimiento.