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El TSJCyL archiva la querella contra la jueza de Belorado por el intento de traslado de monjas ancianas
La Sala de lo Civil y Penal considera infundadas las acusaciones de prevaricación y detención ilegal en este caso
Publicado: 10 de noviembre de 2025, 20:31
El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha decidido archivar la querella interpuesta por las exmonjas del convento de Belorado contra la jueza de Briviesca, acusada de prevaricación, falsedad documental e intento de detención ilegal. Las alegaciones surgieron tras un intento de trasladar a varias monjas ancianas a otro monasterio, una acción que se vio marcada por la oposición de sus compañeras y la intervención de una comisión judicial.
Este conflicto se remonta a finales de julio de 2025, cuando el TSJCyL autorizó que, a solicitud del Ministerio Fiscal y del comisario pontificio, se realizara el traslado de las monjas mayores de Belorado. Sin embargo, este intento fue frustrado por la resistencia de las exreligiosas, quienes aseguraron que se trataba de una acción ilegal. El TSJCyL ha calificado las acusaciones de 'sencillamente estrambóticas' y ha argumentado que no existe base legal para considerar que la jueza actuó de manera prevaricadora.
La resolución del TSJCyL pone fin, al menos temporalmente, a este capítulo del conflicto, aunque se advierte que las fanecias pueden no haber terminado. Las decisiones sobre el futuro de las monjas mayores siguen generando debate y divisiones, tanto dentro de la iglesia como en su relación con la justicia civil.
Este conflicto se remonta a finales de julio de 2025, cuando el TSJCyL autorizó que, a solicitud del Ministerio Fiscal y del comisario pontificio, se realizara el traslado de las monjas mayores de Belorado. Sin embargo, este intento fue frustrado por la resistencia de las exreligiosas, quienes aseguraron que se trataba de una acción ilegal. El TSJCyL ha calificado las acusaciones de 'sencillamente estrambóticas' y ha argumentado que no existe base legal para considerar que la jueza actuó de manera prevaricadora.
La resolución del TSJCyL pone fin, al menos temporalmente, a este capítulo del conflicto, aunque se advierte que las fanecias pueden no haber terminado. Las decisiones sobre el futuro de las monjas mayores siguen generando debate y divisiones, tanto dentro de la iglesia como en su relación con la justicia civil.