El renacimiento de la energía nuclear ante la creciente demanda de uranio y la influencia de Rusia y China

En el contexto actual marcado por la guerra en Ucrania, el interés en la energía nuclear ha alcanzado nuevas alturas, impulsado por la necesidad de seguridad energética y descarbonización. Se espera que las necesidades de uranio crezcan significativamente, alcanzando hasta 150,000 toneladas métricas anuales para 2040. Este aumento de la demanda ha llevado a un disparo en los precios del uranio, actualmente en 75.80 dólares por libra. La concentración de la producción de uranio en unos pocos países, como Kazajistán y Canadá, y el dominio ruso presentan riesgos geopolíticos, lo que ha llevado a naciones como EE.UU. y la UE a replantear sus políticas de suministro.

Sama Bilbao y León, directora general de la Asociación Nuclear Mundial, ha indicado que Rusia y China están a la vanguardia en el desarrollo de infraestructuras nucleares, lo cual subraya la creciente dependencia de Europa y América del Norte del uranio ruso. Esta dependencia y la necesidad de diversificar las fuentes son claves en un contexto donde la percepción pública sobre la energía nuclear está comenzando a cambiar debido a necesidades energéticas apremiantes. Las grandes compañías tecnológicas están comenzando a asegurar acuerdos para acceder a energía nuclear, lo que indica que esta energía será fundamental para el futuro tecnológico del planeta.

Sin embargo, el desafío radica en equilibrar la creciente demanda con la limitada capacidad de producción de uranio. Si no se abordan estas limitaciones, los precios seguirán en aumento, obstaculizando el impulso del renacimiento nuclear, aunque la energía nuclear se perfila como un componente crucial para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París sobre cambio climático.