El procesado hermano de Pedro Sánchez enfrenta un posible juicio por prevaricación y tráfico de influencias

La jueza de Badajoz, Beatriz Biedma, ha decidido procesar a David Sánchez Pérez-Castejón, hermano del presidente del Gobierno español, por presuntos delitos de prevaricación administrativa y tráfico de influencias. Esta decisión marca un significativo avance en la investigación que se ha prolongado durante casi un año y que analiza las circunstancias que rodearon su nombramiento en la Diputación de Badajoz como coordinador de las actividades de los conservatorios.

El auto de procesamiento indica que David Sánchez ocupó un puesto creado ad hoc para él, a pesar de carecer de trabajo estable al momento de su nombramiento, y sugiere que utilizó su influencia para obtener este cargo. El caso ha generado un intenso debate político en España, con reacciones de figuras del Gobierno y la oposición que reflejan tensiones en torno al nepotismo y la corrupción.

Además, la jueza ha comprometido a otros diez investigados, incluyendo a altos funcionarios de la Diputación. Se ha concedido un plazo para que las partes presenten sus escritos, y los detalles de la investigación, que incluyen correos electrónicos, apuntan a un reconocimiento informal de que la plaza estaba destinada para el hermano del presidente, lo que ha suscitado un gran revuelo en la opinión pública.