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El Juzgado embarga todos los bienes de Manuel March por incumplir la condena de 3,5 millones de euros tras venta de mansión
Manuel March debe pagar la cantidad por no devolver el dinero recibido de una venta de finca en Mallorca que quedó inconclusa.
Publicado: 11 de junio de 2025, 12:50
El Juzgado de Primera Instancia nº 10 de Madrid ha dictado el embargo total de los bienes de Manuel March Cencillo, nieto del fundador de Banca March, debido a su incumplimiento de una condena judicial relacionada con la venta de una mansión en Mallorca. Esta decisión se produce tras la negativa de March a realizar un pago cercano a los 3,5 millones de euros, cifra que incluye las costas y los intereses, derivados de una ejecución provisional de una sentencia dictada en 2024.
El origen de la disputa se remonta al verano de 2019, cuando Manuel March decidió poner a la venta una finca histórica en las afueras de Valldemossa, Mallorca. Aunque fue vendida a una empresa en 2021 por ocho millones de euros, la transacción no se finalizó. March vendió posteriormente la finca a un segundo comprador por 12 millones de euros sin devolver el dinero al primer comprador. El juzgado condenó a March a devolver los 2,4 millones y a pagar una indemnización de 300.000 euros, totalizando 3,5 millones.
Al no cumplir con la orden de pago, se procedió al embargo de sus bienes, que resultaron insuficientes, lo que llevó al juzgado a ampliar el embargo a todos sus activos. La jueza subrayó la falta de respuestas creíbles de March sobre la falta de firma necesaria para concretar la venta, señalando que la ausencia de esta no justificaba la resolución a favor del comprador.
El origen de la disputa se remonta al verano de 2019, cuando Manuel March decidió poner a la venta una finca histórica en las afueras de Valldemossa, Mallorca. Aunque fue vendida a una empresa en 2021 por ocho millones de euros, la transacción no se finalizó. March vendió posteriormente la finca a un segundo comprador por 12 millones de euros sin devolver el dinero al primer comprador. El juzgado condenó a March a devolver los 2,4 millones y a pagar una indemnización de 300.000 euros, totalizando 3,5 millones.
Al no cumplir con la orden de pago, se procedió al embargo de sus bienes, que resultaron insuficientes, lo que llevó al juzgado a ampliar el embargo a todos sus activos. La jueza subrayó la falta de respuestas creíbles de March sobre la falta de firma necesaria para concretar la venta, señalando que la ausencia de esta no justificaba la resolución a favor del comprador.