El Govern exige disculpas a Belarra por sus polémicas declaraciones sobre los Mossos y el racismo en Cataluña

La tensión política en Cataluña se ha incrementado tras las declaraciones de Ione Belarra, secretaria general de Podemos, quien afirmó que, si se traspasaran las competencias de inmigración a la Generalitat, los Mossos d'Esquadra podrían realizar 'redadas racistas basadas en el perfil étnico'. Esta afirmación generó una rápida respuesta por parte del Govern, liderado por la consellera de Interior, Núria Parlon, quien exigió una disculpa a Belarra por 'incitar a delitos de odio' contra la policía catalana. La controversia está enmarcada en un pacto para delegar competencias de inmigración a Cataluña, y Parlon resaltó la profesionalidad de los Mossos, defendiendo su capacidad de actuar conforme a la ley. En este contexto, el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, también se pronunció, afirmando: 'No voy a permitir que nadie ponga en duda la profesionalidad del cuerpo'.

Belarra argumentó que su rechazo a las competencias radica en que 'validarían el racismo institucional' en toda España, lo que ha sido criticado por varios líderes independentistas que compararon su discurso con el de la extrema derecha. En una entrevista reciente, Belarra reiteró que, de delegarse estas competencias, mosssos d'Esquadra llevarían a cabo 'batidas racistas', una afirmación que genera un fuerte intercambio de acusaciones. Este conflicto no solo muestra diferencias ideológicas, sino también la lucha por el control y la imagen en la gestión de competencias, en un contexto donde la inmigración y el racismo son temas candentes en la sociedad. Además, se ha evidenciado que, según un estudio de SOS Racismo, los Mossos identifican casi cuatro veces más a extranjeros que a españoles, lo que subraya la inquietud sobre el perfilamiento racial en la actuación policial.