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El Gobierno francés de Sébastien Lecornu sobrevive a dos mociones de censura gracias al apoyo decisivo del Partido Socialista
A pesar del respaldo socialista, la frágil situación política del país plantea un futuro incierto para el primer ministro.
Publicado: 16 de octubre de 2025, 19:39
Este jueves, el primer ministro francés Sébastien Lecornu logró superar dos mociones de censura que amenazaban con desestabilizar su recién formado gobierno. La primera moción, impulsada por la izquierda radical de La Francia Insumisa (LFI), obtuvo 271 votos, quedándose a solo 18 de los 289 necesarios para prosperar. La segunda, presentada por la ultraderecha de la Agrupación Nacional, solo logró 144 votos. El apoyo del Partido Socialista (PS) ha sido crucial para evitar la caída del Ejecutivo de Lecornu, quien prometió suspender la reforma de pensiones a cambio del respaldo de los socialistas.
Lecornu logró continuar en su puesto al comprometerse formalmente a congelar la reforma de pensiones, que eleva la edad de jubilación de 62 a 64 años, hasta enero de 2028. Sin embargo, la votación tuvo tensiones internas, con algunos socialistas votando a favor de la moción, lo que refleja la división en el PS. A pesar de haber esquivado la crisis inmediata, Lecornu enfrenta la compleja tarea de negociar los términos del presupuesto para 2026, donde el apoyo de los socialistas no es un cheque en blanco y podría verse comprometido si el presupuesto es considerado injusto.
La situación política en Francia sigue siendo precaria, y la continuidad del gobierno de Lecornu dependerá de su habilidad para gestionar la aprobación de los presupuestos y mantener la cohesión en un entorno parlamentario fragmentado.
Lecornu logró continuar en su puesto al comprometerse formalmente a congelar la reforma de pensiones, que eleva la edad de jubilación de 62 a 64 años, hasta enero de 2028. Sin embargo, la votación tuvo tensiones internas, con algunos socialistas votando a favor de la moción, lo que refleja la división en el PS. A pesar de haber esquivado la crisis inmediata, Lecornu enfrenta la compleja tarea de negociar los términos del presupuesto para 2026, donde el apoyo de los socialistas no es un cheque en blanco y podría verse comprometido si el presupuesto es considerado injusto.
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