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El Gobierno español confronta a la Conferencia Episcopal por injerencias políticas de Luis Argüello y la búsqueda de neutralidad
Pedro Sánchez y Félix Bolaños critican las declaraciones del arzobispo sobre la situación política actual y reclaman respeto por la aconfesionalidad del Estado.
Publicado: 17 de diciembre de 2025, 21:40
El enfrentamiento entre el Gobierno español y la Conferencia Episcopal toma un nuevo giro tras las declaraciones del presidente de la Conferencia, Luis Argüello, sobre la posible injerencia de la Iglesia en la política, sugiriendo una cuestión de confianza o elecciones ante el actual bloqueo político. Esta situación ha preocupado al Ejecutivo, que considera que estas manifestaciones son inadecuadas en un Estado aconfesional. Pedro Sánchez ha respondido a Argüello, afirmando que el tiempo de interferencias políticas por parte de obispos ha acabado con la democracia en el país.
Félix Bolaños, ministro de Justicia, ha enviado una carta a Argüello, indicando que sus comentarios son inadecuados y rompen la neutralidad política que debería mantener la Iglesia. Bolaños también sugiere que las declaraciones del arzobispo podrían reflejar una preferencia hacia un Gobierno de derecha, vinculado a ideologías que apoyan símbolos franquistas, lo que agrava el conflicto actual. Históricamente, este tipo de enfrentamientos ya habían ocurrido entre el Gobierno y la Iglesia, como en el caso del aborto y el matrimonio homosexual.
El clima político en España es tenso, y la forma en que se maneje este conflicto entre el Gobierno y la Conferencia Episcopal podría afectar la estabilidad política y social en un momento donde el país enfrenta múltiples desafíos. El diálogo entre ambas partes es crucial para evitar que estas tensiones escalen a una crisis mayor.
Félix Bolaños, ministro de Justicia, ha enviado una carta a Argüello, indicando que sus comentarios son inadecuados y rompen la neutralidad política que debería mantener la Iglesia. Bolaños también sugiere que las declaraciones del arzobispo podrían reflejar una preferencia hacia un Gobierno de derecha, vinculado a ideologías que apoyan símbolos franquistas, lo que agrava el conflicto actual. Históricamente, este tipo de enfrentamientos ya habían ocurrido entre el Gobierno y la Iglesia, como en el caso del aborto y el matrimonio homosexual.
El clima político en España es tenso, y la forma en que se maneje este conflicto entre el Gobierno y la Conferencia Episcopal podría afectar la estabilidad política y social en un momento donde el país enfrenta múltiples desafíos. El diálogo entre ambas partes es crucial para evitar que estas tensiones escalen a una crisis mayor.