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El escándalo de torturas en Israel desata la detención de la fiscal y la celebración de la ultraderecha
La exfiscal militar es arrestada tras filtrar un video que revela abusos a un prisionero palestino, mientras la ultraderecha la aplaude.
Publicado: 5 de noviembre de 2025, 07:50
En un desarrollo que ha captado la atención de los medios internacionales, la exfiscal militar israelí Yifat Tomer-Yerushalmi fue detenida tras admitir haber filtrado un video que muestra las torturas a un prisionero palestino en el campo de detención de Sde Teiman. Este incidente ha desatado reacciones tanto en el ámbito judicial como político, con la ultraderecha israelí centrándose en celebrar su arresto en lugar de abordar las graves acusaciones de abusos.
El video, emitido por el canal Channel 12, reveló cómo varios soldados torturaban y violaban a un detenido palestino, suscitando una ola de indignación sobre el tratamiento de los prisioneros en Israel. La fiscalía, liderada por Tomer-Yerushalmi, había iniciado investigaciones que involucraban a reservistas de las FDI acusados de violencia extrema, pero su intento de ocultar evidencia resultó en su arresto y confinamiento solitario.
Benjamín Netanyahu ha catalogado la filtración como "el gran fracaso mediático" del país, enfatizando que este escándalo ha dañado la reputación de las fuerzas armadas. Las condiciones de vida de los prisioneros han sido muy cuestionadas, con informes de abusos sistemáticos y torturas, todo en medio de un contexto de creciente polarización social en Israel.
El video, emitido por el canal Channel 12, reveló cómo varios soldados torturaban y violaban a un detenido palestino, suscitando una ola de indignación sobre el tratamiento de los prisioneros en Israel. La fiscalía, liderada por Tomer-Yerushalmi, había iniciado investigaciones que involucraban a reservistas de las FDI acusados de violencia extrema, pero su intento de ocultar evidencia resultó en su arresto y confinamiento solitario.
Benjamín Netanyahu ha catalogado la filtración como "el gran fracaso mediático" del país, enfatizando que este escándalo ha dañado la reputación de las fuerzas armadas. Las condiciones de vida de los prisioneros han sido muy cuestionadas, con informes de abusos sistemáticos y torturas, todo en medio de un contexto de creciente polarización social en Israel.