Progresista 67.5%Conservador 32.5%

El bloque conservador del CGPJ renueva su estructura interna con el apoyo de un vocal progresista y la presidenta Isabel Perelló

Este nuevo reparto de poderes en el Consejo General del Poder Judicial despierta el rechazo del sector progresista, que denuncia la ruptura de consensos.

Publicado: 23 de octubre de 2025, 19:05

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha pasado por una reestructuración interna significativa, consolidando el poder del bloque conservador. Con 12 votos a favor y 9 en contra, la votación ha sido un reflejo de un ajuste en la distribución del poder, donde la presidenta Isabel Perelló y el vocal Carlos Hugo Preciado, a pesar de su afiliación a Sumar, han apoyado a la mayoría conservadora. Este cambio ha generado tensiones, ya que los vocales progresistas ven esta reestructuración como un atropello a los acuerdos previos de equilibrio en las comisiones del CGPJ.

Las reacciones han sido intensas, con vocales progresistas como José María Fernández Seijo considerando posibles acciones legales ante lo que perciben como un desmantelamiento del consenso dentro del consejo. [Este conflicto ha adquirido nuevas dimensiones, ya que Seijo ha anunciado su dimisión, la cual se ha considerado irrevocable y motivada por razones personales]. La reciente inclusión de Inés Herreros en la Comisión de Escuela Judicial resalta las tensiones internas que marcan esta nueva etapa del CGPJ. Con el bloque conservador dominando, se prevén ajustes significativos en las decisiones judiciales que afectarán a la cúpula judicial en España en los próximos meses.

Este cambio no solo redefine el equilibrio de poder en el CGPJ, sino que también influye en cómo se manejarán futuras políticas judiciales y nombramientos, llevando a un entorno donde la presión y las negociaciones continuas serán esenciales para el sector progresista, que lucha por mantener sus derechos y representación ante un consejo que perciben como reconfigurado en su contra. [Los vocales progresistas han emitido un comunicado conjunto denunciando la ruptura del consenso, al señalar que la presidenta Perelló ha impuesto de manera abrupta un nuevo modelo de comisiones que excluye a casi la mitad de los vocales del consejo, alterando así las reglas de cooperación que habían sido pactadas al inicio de su mandato]. Este contexto de ruptura se agrava al considerar que, en la nueva composición, la mayoría de las comisiones ahora están dominadas por el bloque conservador, mientras que los progresistas se han visto relegados.

Con estas dinámicas en juego, el futuro del CGPJ parece estar marcado por una creciente polarización, donde la colaboración entre los bloques se encuentra en un punto crítico y los vocales progresistas deben navegar en un entorno que les ha excluido significativamente.