Progresista 100%Conservador 0%
Donald Trump autoriza a Nvidia la venta de chips de inteligencia artificial a China, generando debate sobre implicaciones económicas y de seguridad
Esta decisión permitirá a Nvidia vender su chip H200 a clientes chinos con un arancel del 25%, en medio de tensiones comerciales.
Publicado: 9 de diciembre de 2025, 10:17
El presidente Donald Trump ha autorizado a Nvidia a vender su microprocesador H200 a clientes en China, una decisión que ha generado tanto apoyo como críticas. Este movimiento, acompasado por un arancel del 25%, busca aumentar los ingresos y empleos en EE.UU., a pesar de las preocupaciones sobre la seguridad nacional y las tensiones entre ambos países. El chip H200 representa un avance significativo en la relación comercial, siendo más potente que los modelos anteriores permitidos.
Trump mencionó que el presidente chino, Xi Jinping, recibió la decisión positivamente, y se espera que el Departamento de Comercio implemente revisiones de seguridad antes de la venta a China. Nvidia se mostró satisfecha, argumentando que esto fomentará empleos bien remunerados en EE.UU. y mejorará su competitividad. Sin embargo, algunos legisladores expresan escepticismo con respecto a las implicaciones de esta medida en la carrera tecnológica entre EE.UU. y China.
La autorización de venta de chips podría abrir la puerta para que otros fabricantes como AMD e Intel también reanuden sus ventas a China, un mercado altamente lucrativo. La industria tecnológica estadounidense observa atentamente cómo se implementará esta política, dada la preocupación creciente por el uso militar de la tecnología avanzada en China.
Trump mencionó que el presidente chino, Xi Jinping, recibió la decisión positivamente, y se espera que el Departamento de Comercio implemente revisiones de seguridad antes de la venta a China. Nvidia se mostró satisfecha, argumentando que esto fomentará empleos bien remunerados en EE.UU. y mejorará su competitividad. Sin embargo, algunos legisladores expresan escepticismo con respecto a las implicaciones de esta medida en la carrera tecnológica entre EE.UU. y China.
La autorización de venta de chips podría abrir la puerta para que otros fabricantes como AMD e Intel también reanuden sus ventas a China, un mercado altamente lucrativo. La industria tecnológica estadounidense observa atentamente cómo se implementará esta política, dada la preocupación creciente por el uso militar de la tecnología avanzada en China.