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Detenidos patrones de un cayuco por homicidios y torturas a migrantes en la peligrosa ruta canaria
La Policía Nacional arresta a 19 personas en una operación tras la desaparición de más de 50 migrantes en alta mar.
Publicado: 17 de septiembre de 2025, 12:30
La Policía Nacional ha detenido a 19 individuos identificados como patrones de un cayuco tras la desgarradora desaparición de más de 50 migrantes en la travesía hacia España, catalogado como uno de los más trágicos en la peligrosa ruta canaria, la más letal del mundo para migrantes en busca de una mejor vida. El cayuco fue rescatado a la deriva el 24 de agosto cerca de Gran Canaria, con testimonios de supervivientes que denunciaron homicidios y torturas perpetradas por los propios patrones de la embarcación.
La investigación, enmarcada en la Operación Tritón, ha documentado no solo agresiones físicas, sino también maltratos de diversos tipos. Algunas supersticiones entre migrantes provocaron homicidios en momentos de crisis. Adicionalmente, la ONG Caminando Fronteras reporta que al menos 1.865 migrantes han muerto entre enero y mayo de 2025 intentando llegar a las costas españolas, lo que convierte la crisis en un tema de atención internacional. Un informe policial reciente acusa a los patrones de haber tirado a 50 migrantes por la borda en plena travesía. Todos los detenidos se encuentran ya en prisión provisional. Según el relato que han narrado los supervivientes a la Policía, los acusados habrían agredido brutalmente a otros ocupantes y habrían arrojado al menos a 50 personas vivas por la borda.
Los detenidos enfrentan acusaciones de favorecimiento de la inmigración irregular, homicidio, lesiones y torturas. La brutalidad de estos hechos representa un capítulo sombrío en las riesgosas travesías que enfrentan los migrantes en busca de esperanza. Varios testimonios apuntan que el cayuco habría salido del continente africano con cerca de 320 personas, por lo que la cifra de víctimas mortales podría elevarse incluso hasta 70. La investigación policial apunta a que los presuntos autores habrían culpado a otros migrantes de los incidentes causados durante los 11 días de trayecto, llegando incluso a tirar al mar a personas que simplemente protestaban por las durísimas condiciones del viaje. Los testimonios recabados apuntan a que las supersticiones jugaron un papel crucial en estos hechos violentos, siendo considerados 'brujos' a determinados tripulantes cuando ocurrían incidentes.
La investigación, enmarcada en la Operación Tritón, ha documentado no solo agresiones físicas, sino también maltratos de diversos tipos. Algunas supersticiones entre migrantes provocaron homicidios en momentos de crisis. Adicionalmente, la ONG Caminando Fronteras reporta que al menos 1.865 migrantes han muerto entre enero y mayo de 2025 intentando llegar a las costas españolas, lo que convierte la crisis en un tema de atención internacional. Un informe policial reciente acusa a los patrones de haber tirado a 50 migrantes por la borda en plena travesía. Todos los detenidos se encuentran ya en prisión provisional. Según el relato que han narrado los supervivientes a la Policía, los acusados habrían agredido brutalmente a otros ocupantes y habrían arrojado al menos a 50 personas vivas por la borda.
Los detenidos enfrentan acusaciones de favorecimiento de la inmigración irregular, homicidio, lesiones y torturas. La brutalidad de estos hechos representa un capítulo sombrío en las riesgosas travesías que enfrentan los migrantes en busca de esperanza. Varios testimonios apuntan que el cayuco habría salido del continente africano con cerca de 320 personas, por lo que la cifra de víctimas mortales podría elevarse incluso hasta 70. La investigación policial apunta a que los presuntos autores habrían culpado a otros migrantes de los incidentes causados durante los 11 días de trayecto, llegando incluso a tirar al mar a personas que simplemente protestaban por las durísimas condiciones del viaje. Los testimonios recabados apuntan a que las supersticiones jugaron un papel crucial en estos hechos violentos, siendo considerados 'brujos' a determinados tripulantes cuando ocurrían incidentes.