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Detenido un joven turista por arrancar estalactitas en las Coves de Sant Josep, un ataque al patrimonio histórico
La Guardia Civil ha procedido a la detención de un joven moldavo de 23 años por fracturar dos estalactitas en este lugar protegido.
Publicado: 11 de junio de 2025, 20:17
La Guardia Civil ha arrestado a un joven de 23 años, de nacionalidad moldava, por su actuación ilegal en las Coves de Sant Josep, un paraje natural considerado un Bien de Interés Cultural y Patrimonio Mundial de la Unesco. El incidente ocurrió el martes durante su visita a este destacado río subterráneo, que es el más extenso de Europa y que solo se puede recorrer mediante visitas guiadas.
El presunto delincuente fue sorprendido mientras arrancaba dos estalactitas de la cueva, acción que constituye un delito contra el patrimonio histórico. Un trabajador del paraje, al percatarse de la acción destructiva, alertó a las autoridades, quienes se desplazaron al lugar y procedieron con la detención del joven infractor. Está programado que el detenido pase a disposición judicial en las próximas horas, lo que subraya la gravedad de la situación y las consecuencias legales que pueden derivarse del ataque al patrimonio natural.
Las Coves de Sant Josep no solo son un atractivo turístico, sino también un sitio de interés cultural y arqueológico, con evidencias de ocupación humana que datan de hace aproximadamente 17.000 años. Este impacto representativo del ser humano en la naturaleza hace aún más preocupante el acto vandálico cometido por el turista. La protección de este tipo de lugares es crucial para la conservación de la historia y la cultura local.
El presunto delincuente fue sorprendido mientras arrancaba dos estalactitas de la cueva, acción que constituye un delito contra el patrimonio histórico. Un trabajador del paraje, al percatarse de la acción destructiva, alertó a las autoridades, quienes se desplazaron al lugar y procedieron con la detención del joven infractor. Está programado que el detenido pase a disposición judicial en las próximas horas, lo que subraya la gravedad de la situación y las consecuencias legales que pueden derivarse del ataque al patrimonio natural.
Las Coves de Sant Josep no solo son un atractivo turístico, sino también un sitio de interés cultural y arqueológico, con evidencias de ocupación humana que datan de hace aproximadamente 17.000 años. Este impacto representativo del ser humano en la naturaleza hace aún más preocupante el acto vandálico cometido por el turista. La protección de este tipo de lugares es crucial para la conservación de la historia y la cultura local.