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Descubrimiento de la nebulosa RaJav, cuatro veces más grande que la Vía Láctea, abre nuevas puertas en la astronomía.
Se trata de un hallazgo relevante debido a su tamaño y la información que proporciona sobre la formación de galaxias en el universo primitivo.
Publicado: 12 de noviembre de 2025, 20:28
El Centro de Estudios de Física del Cosmos de Aragón (CEFCA) ha anunciado un extraordinario hallazgo en el campo de la astronomía: una gigantesca nebulosa denominada RaJav, localizada a aproximadamente 11.000 millones de años luz de la Tierra. Esta nebulosa pertenece a la categoría de Enormous Lyman-Alpha Nebulae (ELANe), a la que solo se han registrado otras seis en el vasto cosmos.
Este descubrimiento es notable no solo por el tamaño de RaJav, que supera en dimensiones al disco de nuestra Vía Láctea en casi cuatro veces, sino también por la información que este fenómeno puede proporcionar sobre el cosmos en sus etapas más tempranas. Los datos que llevaron a la identificación de RaJav fueron recopilados gracias al programa de cartografiado J-PAS, que utiliza una avanzada cámara JPCam instalada en el telescopio JST250 del Observatorio Astrofísico de Javalambre, ubicado en Teruel.
Las precisas mediciones realizadas por J-PAS, que emplea 56 filtros ópticos, han facilitado conectar a RaJav con la presencia de dos cuásares, que son núcleos galácticos brillantes alimentados por agujeros negros supermasivos. Este hallazgo resalta la importancia del avance tecnológico en la astronomía y el papel de proyectos como J-PAS en la expansión de nuestro conocimiento sobre el universo.
Este descubrimiento es notable no solo por el tamaño de RaJav, que supera en dimensiones al disco de nuestra Vía Láctea en casi cuatro veces, sino también por la información que este fenómeno puede proporcionar sobre el cosmos en sus etapas más tempranas. Los datos que llevaron a la identificación de RaJav fueron recopilados gracias al programa de cartografiado J-PAS, que utiliza una avanzada cámara JPCam instalada en el telescopio JST250 del Observatorio Astrofísico de Javalambre, ubicado en Teruel.
Las precisas mediciones realizadas por J-PAS, que emplea 56 filtros ópticos, han facilitado conectar a RaJav con la presencia de dos cuásares, que son núcleos galácticos brillantes alimentados por agujeros negros supermasivos. Este hallazgo resalta la importancia del avance tecnológico en la astronomía y el papel de proyectos como J-PAS en la expansión de nuestro conocimiento sobre el universo.