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Controversia entre el Gobierno de Aragón y el MNAC por las Pinturas de Sijena se Intensifica
Los técnicos de Aragón trabajan en el MNAC y denuncian falta de colaboración mientras el museo se remite al juez.
Publicado: 29 de julio de 2025, 19:53
La tensión entre el gobierno de Aragón y el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) por el tema de las pinturas de Sijena ha escalado en los últimos días. Los técnicos aragoneses han iniciado el análisis de las pinturas que se encuentran en el MNAC con miras a su eventual traslado al Monasterio de Sijena. Sin embargo, su labor se ha visto obstaculizada por la negativa del museo a proporcionar documentación necesaria y a permitir la toma de muestras, lo que ha llevado a una serie de quejas por parte del ejecutivo aragonés.
El presidente del gobierno aragonés, Jorge Azcón, ha expresado su descontento, calificando de "incomprensibles" las restricciones impuestas por el MNAC. Según Azcón, los técnicos aragoneses han enfrentado resistencias en su intento de colaborar y obtener la información requerida para garantizar un traslado seguro de las obras. Mientras tanto, el MNAC ha defendido su postura argumentando que cualquier solicitud de toma de muestras debe pasar por el sistema judicial, que está llevando el caso. La situación destaca la creciente tensión entre ambas instituciones en un contexto de cooperación y confrontación por temas de patrimonio cultural.
A medida que el plazo de siete meses para el traslado de las pinturas se acerca, el gobierno de Aragón ha dejado claro que espera el cumplimiento de las sentencias judiciales y advierte que la Generalitat deberá enfrentar las consecuencias de no hacerlo, aumentando la complejidad de la dinámica entre las instituciones culturales y políticas de Aragón y Cataluña.
El presidente del gobierno aragonés, Jorge Azcón, ha expresado su descontento, calificando de "incomprensibles" las restricciones impuestas por el MNAC. Según Azcón, los técnicos aragoneses han enfrentado resistencias en su intento de colaborar y obtener la información requerida para garantizar un traslado seguro de las obras. Mientras tanto, el MNAC ha defendido su postura argumentando que cualquier solicitud de toma de muestras debe pasar por el sistema judicial, que está llevando el caso. La situación destaca la creciente tensión entre ambas instituciones en un contexto de cooperación y confrontación por temas de patrimonio cultural.
A medida que el plazo de siete meses para el traslado de las pinturas se acerca, el gobierno de Aragón ha dejado claro que espera el cumplimiento de las sentencias judiciales y advierte que la Generalitat deberá enfrentar las consecuencias de no hacerlo, aumentando la complejidad de la dinámica entre las instituciones culturales y políticas de Aragón y Cataluña.