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Conflicto entre la Generalitat y Ayuso sobre la recaudación del IRPF en Cataluña se intensifica antes de la bilateral del 14 de julio
La Generalitat defiende el acuerdo de financiación singular mientras Ayuso denuncia un posible “atropello” financiero hacia Madrid.
Publicado: 8 de julio de 2025, 19:22
El enfrentamiento entre la Generalitat de Cataluña y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha intensificado en la antesala de la reunión bilateral programada para el 14 de julio, que tratará la recaudación del IRPF. Ayuso critica el acuerdo de financiación como ilegal, perjudicial para Madrid, y argumenta que puede generar una carga económica substantiva para los ciudadanos madrileños. Por otro lado, la consellera Silvia Paneque defiende el acuerdo, afirmando que es parte de los compromisos con ERC y no debe ser utilizado como moneda de cambio en otras negociaciones.
Díaz Ayuso ha expresado su preocupación en diversos foros, afirmando que el acuerdo implica una recolección excesiva de impuestos, lo que considera un ataque a la comunidad madrileña. Algunos miembros del Gobierno critican su postura, como Francisco Martín, que señala que Ayuso se alinea con la extrema derecha y genera un clima de confrontación. La tensión también se ve exacerbada por el debate sobre la inmigración, donde Ayuso ha cuestionado las políticas del Gobierno, señalando que contribuyen a un aumento de la inmigración irregular.
La bilateral no solo tiene implicaciones económicas significativas, sino que también afecta las relaciones políticas entre Cataluña y Madrid en un contexto que se está polarizando cada vez más, resaltando la necesidad de un enfoque colaborativo en lugar de uno divisorio.
Díaz Ayuso ha expresado su preocupación en diversos foros, afirmando que el acuerdo implica una recolección excesiva de impuestos, lo que considera un ataque a la comunidad madrileña. Algunos miembros del Gobierno critican su postura, como Francisco Martín, que señala que Ayuso se alinea con la extrema derecha y genera un clima de confrontación. La tensión también se ve exacerbada por el debate sobre la inmigración, donde Ayuso ha cuestionado las políticas del Gobierno, señalando que contribuyen a un aumento de la inmigración irregular.
La bilateral no solo tiene implicaciones económicas significativas, sino que también afecta las relaciones políticas entre Cataluña y Madrid en un contexto que se está polarizando cada vez más, resaltando la necesidad de un enfoque colaborativo en lugar de uno divisorio.